El Gobierno británico se plantea el cierre a partir del próximo lunes de bares y restaurantes en el norte de Inglaterra, una medida aplicada ya en partes de Escocia, para contener el coronavirus. Otras capitales europeas, como París, han tomado la misma decisión.

La cadena pública BBC dice que el Ejecutivo podría introducir también un sistema de alerta local de tres niveles que indicaría el grado de riesgo en las diferentes áreas geográficas, lo que llevaría a imponer distintas restricciones.

Las zonas del norte de Inglaterra con más repunte de contagios incluyen las ciudades de Manchester, Liverpool y Newcastle, entre otras, donde ya es ilegal mezclarse con miembros de otro hogar en lugares cerrados y los pubs cierran a las 22.00 horas.

SIN ALCOHOL EN ESCOCIA

La ministra principal del Gobierno escocés, Nicola Sturgeon, anunció ayer que a partir del viernes, en cinco áreas del centro de Escocia, incluidas las ciudades de Glasgow y Edimburgo, cerrarán los establecimientos hosteleros, menos cafeterías que no vendan alcohol, durante dos semanas.

Las restricciones se aplicarán hasta el 25 de octubre en los bares, "pubs" y restaurantes de las zonas de Greater Glasgow & Clyde, Lanarkshire, Ayrshire & Arran, Lothian y Forth Valley, donde solo podrán servir comida para llevar.

En el resto de Escocia, durante este periodo los establecimientos hosteleros tendrán que cerrar el servicio en su interior a las 18.00 horas y no podrán ofrecer alcohol, aunque sí podrán hacerlo en las terrazas, hasta las 22.00 horas.

En el "cinturón central", con más contagios, se cerrarán a partir del 10 de octubre las boleras y las salas de bingo y de billar, se suspenden los deportes de contacto para los mayores de 18 años (salvo profesionales) y los actos al aire libre, aunque los gimnasios permanecerán abiertos.