Poco antes de que Pedro Sánchez se sometiera al debate de investidura, la Moncloa anunció que la intención del jefe del Ejecutivo era celebrar todos los años una conferencia de presidentes autonómicos en el Senado. La primera cumbre de este tipo tendrá un formato y unos contenidos muy alejados de lo que el líder socialista pensó cuando lanzó esta iniciativa.

Este sábado, por videoconferencia, el presidente y los mandatarios de las comunidades abordarán la crisis del coronavirus. Analizarán la expansión de la epidemia y las medidas para frenarla. El lunes, en principio de forma presencial, Sánchez mantendrá una reunión con el conjunto de la oposición, según fuentes de la Moncloa. Ese encuentro ya ha sido propuesto a la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, pero todavía se desconocen los detalles. La cita llega con la Cámara baja a medio gas, después de que este martes se decidiese cancelar los plenos por el riesgo de contagio, toda vez que el grupo de Vox está en cuarentena tras confirmarse que Javier Ortega Smith ha contraído la enfermedad.

El pasado martes, durante su comparecencia específica sobre el coronavirus, Sánchez resaltó la necesidad de que todas las administraciones estén unidas frente a la epidemia, tanto más en un sistema donde las competencias en salud pública recaen sobre las autonomías. Para vencer una amenaza como esta se requieren dos condiciones: sistema sanitario robusto y una respuesta coordinada por parte de todos, dijo el líder socialista.

Conversaciones privadas

Y pese a las críticas de la oposición, con el PP y Vox acusando en los últimos días al Gobierno de inacción, la versión de Sánchez es que, en privado, tanto Pablo Casado como Santiago Abascal le dicen otra cosa.

Los españoles quieren ver a todos los responsables políticos unidos, trabajando codo con codo, explicó Sánchez. Desde el punto de vista de las organizaciones políticas, la voluntad, al menos en las conversaciones privadas, es de absoluta coordinación con el Gobierno. Lo tengo que agradecer. Tenemos que trasladar un mensaje unívoco, añadió el presidente.