La derrota del pasado miércoles en el Camp Nou unida a la victoria del Sevilla ante el Madrid han complicado un tanto la clasificación europea de un Villarreal que, sin embargo, afronta las dos últimas jornadas decisivas de la Liga en una posición inmejorable para certificar su pase a la Europa League 2018/2019, ya sea evitando las incómodas rondas previas —hasta tres a partir del 26 de julio— como quinto o sexto de la competición española o, en el peor de los casos, teniendo que adelantar considerablemente la pretemporada si el Submarino entrara en el segundo torneo continental a través de la séptima plaza, una circunstancia que solo se da en el 17% de las múltiples combinaciones de resultados que pueden deparar las jornadas 37 y 38 de LaLiga, con cuatro conjuntos, incluido el Villarreal, en la liza por los últimos puestos europeos que faltan por repartir. Eliminado el Girona, al que pese a su meritoria campaña de estreno en Primera ya no le da para alcanzar la séptima posición, Betis, el propio Submarino, el Sevilla y el Getafe dirimirán el orden de las tres plazas de Europa League y del equipo que se quedará a las puertas.

En un 98% de las más de 850 combinaciones de resultados que afectan al Villarreal en la pelea entre los cuatro implicados, el conjunto amarillo certificaría su quinta presencia consecutiva en la Europa League. La opción más probable sería la sexta posición, con más del 50% de posibilidades de conseguirla para el conjunto amarillo, mientras que acceder al segundo torneo de clubs de la UEFA depende de los posibles pinchazos de un Betis que tiene su partido más complicado en el derbi sevillano de mañana en el Villamarín. Solo el 29% de las opciones colocan al Villarreal inmediatamente por detrás de los cuatro conjuntos que representarán al fútbol español en la próxima Champions: Barça, Atlético, Real Madrid y Valencia.

UN PELIGRO REMOTO

El premio menor de la séptima posición se daría en un 17% de las combinaciones, mientras que las posibilidades de que el Submarino se quedara fuera de Europa se ciñen a un remoto 2%, un peligro mínimo pero real y que pasaría por una debacle de los hombres de Javier Calleja ante el Deportivo —este sábado en Riazor— y el Madrid —el siguiente sábado—. No poder sumar ningún triunfo en los dos compromisos pendientes obligaría a estar pendientes de los resultados de terceros, sobre todo de los del Getafe, que con un pleno en sus dos últimos encuentros —Atlético y Málaga— podría dejar fuera al Villarreal. En este caso, solo que el Sevilla no superara o igualara en puntos a los amarillos —los andaluces tienen la diferencia de goles particular, en incluso en un posible triple empate entre groguets, sevillistas y azulones, a favor— permitiría al Submarino superar el trance, eso sí, siempre en la séptima posición y con tres rondas previas de Europa League por delante.

Para evitar riesgos innecesarios, el conjunto amarillo pasó ayer página a la goleada encajada en el Camp Nou (5-1) y empezó a preparar la visita a un Deportivo que se presenta como la opción más factible para conseguir los puntos que faltan para asegurar la plaza continental, aunque también se espera que el Madrid llegue en la última jornada al Estadio de la Cerámica plagado de suplentes y jugadores del filial blanco ante la cercanía de la finalísima de la Champions tan solo una semana después.

PRECEDENTES EN RIAZOR

El Villarreal deberá mantener, como mínimo, sus últimas prestaciones en el estadio coruñés para intentar cerrar definitivamente el objetivo ante un rival que ya planifica la próxima temporada en Segunda y que arrastra cuatro jornadas consecutivas sin conocer la victoria. El Submarino ha sacado de Riazor tres resultados positivos de forma consecutiva en las últimas temporadas. Quizá los empates de la pasada campaña (0-0) y de la Liga 2014/2015 (1-1) puedan bastar en el caso de que el Getafe no gane al Atlético en el Coliseum. Pero, por si acaso, el referente al que agarrarse será el 1-2 de la temporada 2015/2016. Un triunfo que abriría ya de par en par las puertas de Europa.