Defendió durante tres temporadas el marco del Villarreal B, pero la falta de oportunidades le hizo volar de Miralcamp hacia retos más importantes y en superior categoría, como su salida tras ser groguet al Numancia, de Segunda División A. Ahora, el guardameta del rival de este sábado en La Cerámica, el Levante UD, Aitor Fernández, es uno de los porteros mejor valorados de LaLiga. Un cancerbero vasco que abandonó hace cuatro años el Submarino, después de haber jugado en su filial de 2ª B entre el 2013 y el 2016 y coincidir, además, con su actual entrenador, Paco López.

El futbolista afronta su segunda campaña en el Levante, pero cierto es que hasta la fecha no había tenido la ocasión de enfrentarse a su exequipo en el feudo amarillo, ya que el curso pasado el meta titular era Oier Olazábal.

Su pasado ‘groguet’

El portero nacido en Arrasate estuvo en el filial del Villarreal entre el 2013 y el 2016 durante tres temporadas y media en 2ª División B, donde coincidió dos años con Paco López en el banquillo y llegó a disputar la promoción de ascenso a Segunda A en el 2016.

Tras jugar en el Villarreal B, Aitor abandonó el club y se marchó al Numancia, en Segunda División A, durante dos ejercicios, y el Levante pagó un millón de euros por él en el verano del 2018 por petición de Paco López.

El granota sí que se ha enfrentado en dos ocasiones en Liga al Villarreal en el Ciutat de València, con una victoria y una derrota.

El guardameta vasco atraviesa el mejor momento de su carrera, es uno de los seis porteros de Primera División que ha disputado todos los minutos e incluso se ha hablado de que está en la órbita de la selección española.