La alcaldesa de Castellón de la Plana, Amparo Marco, ha denunciado este jueves, por medio de varios tuits, amenazas y acoso que han sufrido familiares directos por parte de personas críticas con la gestión del Ayuntamiento en el tema de la reforma y cesión al CD Castellón del Estadio Castalia, pendiente de un convenio todavía sin fecha de firma.

Amparo Marco ha mostrado su malestar en las redes sociales, defendiendo su postura de ayudar al club albinegro desde su llegada a la alcaldía, y lamentando situaciones de "insultos, amenazas y acoso" en las que se ha visto envuelta su familia.

La tensión entre el gobierno municipal y el CD Castellón por la cesión de Castalia ha crecido en los últimos días, sobre todo a tenor de las inundaciones del recinto la pasada semana y las declaraciones efectuadas por el presidente de la entidad albinegra, Vicente Montesinos, que incluso ha amenazado con su dimisión del cargo si el consistorio no rectifica sus exigencias económicas.

"El Ayuntamiento pretende ceder Castalia, pero tenemos que pagar 150.000 euros y hacernos cargo del mantenimiento. Dicen que van a invertir un millón de euros, pero lo acabamos pagando nosotros. Viven alejados de la realidad", señaló hace unos días Montesinos en Radio Castellón. "Nosotros ponemos el dinero en jugadores y fútbol y el continente lo ha de poner el Ayuntamiento sin medias tintas", añadió el presidente albinegro.

La guerra institucional se ha trasladado inevitablemente a la calle y a las redes sociales, con las quejas de un sector de aficionados del CD Castellón que piden mayor seguridad en Castalia. La Federación de Peñas del CD Castellón (Fedpecas) ha organizado una "concentración pacífica" este sábado (19.00 horas) antes del estreno liguero de los albinegros ante el Baleares en señal de protesta por "el precario estado del Estadio Castalia".