Partido muy frío, tanto como el tiempo, el vivido ayer en el San Fernando, ante 300 espectadores, con un viento intenso que perjudicó mucho a los jugadores, impidiendo incluso controlar el balón en condiciones.

Muy pronto se vio que el Alcora llegaba con la lección muy bien aprendida, a no dejar jugar al equipo local, al que atenazó muy bien en la línea medular y en la delantera, sin dejar opciones a los rápidos jugadores locales, que prácticamente no tuvieron ocasiones de gol.

La mejor por parte de los locales la tuvo Zapata, en el minuto 35, con un tiro de fuera del área muy esquinado que despejó muy bien el portero visitante.

También el Alcora, unos minutos antes, tuvo en las botas de Breto una ocasión magnífica de gol, que salió bordeando el poste cuando ya se cantaba el gol.

Con empate a ocasiones y en resultado se llegó al descanso, con la confianza entre el público local en que el juego mejoraría, lo que al final no sucedió, aunque en el primer minuto David Sáez tuvo la mejor ocasión para los locales cuando en un uno contra uno con el portero, su potente chut salió rozando el poste.

Cuando más volcados estaban los azules en la portería visitante, en el minuto 58 llegó la jugada que marcaría el partido, en un rápido contraataque de Breto que definió Ribes ante la salida del guardameta local, Raúl.

A partir de ahí el Alcora se limitó a jugar su partido, defendiéndose con uñas y dientes y saliendo al contragolpe con rápidas jugadas que pudieron haber hecho aumentar la ventaja.

El Burriana lo intentó todo, con los cambios de Pablo García y Marc Albalat, pero sus jugadores no tenían el día y no acertaban a penetrar en la fornida defensa visitante. Marc Albalat y Barreda dispusieron de las dos últimas ocasiones, la última de ellas en el descuento, pero el marcador ya no se movería más.

Con esta derrota en casa, el Burriana pierde muchas opciones de engancharse a los puestos de promoción, que cada semana parecen más lejos, y el Alcora se aposenta con tranquilidad en la zona cómoda de la tabla.