El Almazora supo aprovechar la visita del Muro, uno de los equipos que ocupan los últimos lugares de la tabla, para romper su racha de empates y sumar tres puntos en casa que sirven para mentenerle una jornada más en la zona media de la clasificación y seguir acercándole al objetivo de la permanencia en Tercera.

El público que acudió al José Manuel Pesudo en la matinal del domingo no presenció un gran partido de fútbol precisamente, siendo lo mejor que se vio durante los 90 minutos de juego el gran tanto de chilena de Nico. Un golazo que valió la victoria ante un rival que, pese a lo que indica su clasificación, se mostró en todo momento muy rocoso y difícil de batir, por lo que no resultó desde luego una ‘perita en dulce’ para los discípulos de Iván Medall. La férrea defensa de los visitantes contribuyó, pues, a que apenas se creasen ocasiones de gol para ambas escuadras.

En el primer tiempo los almazorenses estuvieron un tanto espesos y sin ideas claras en el aspecto ofensivo, sin que tampoco el conjunto visitante se mostrara demasiado peligroso en sus ataques y contragolpes. Ni unos ni otros crearon peligro reseñable, tampoco a balón parado, predominando el juego defensivo y con nulas ocasiones.

El conjunto local tuvo que esperar al segundo tiempo para abrir la lata y hacerse con el premio. Corría el minuto 53 cuando Nico culminó con una chilena espectacular un ataque que se convirtió en el único gol del partido, tres puntos de oro y un respiro para un Almazora que sufrió hasta el último segundo para llevarse ayer los tres puntos.

Por lo demás y quitando el gol, las ocasiones fueron muy escasas y el juego defensivo volvió a predominar, constituyendo las faltas y los saques de esquina el único bagaje ofensivo de ambos equipos en un partido bastante pobre, en el que lo mejor para los locales fue la victoria conseguida y los tres puntos. H