Pese a que llegó con la temporada anterior ya comenzada, Álvaro González se convirtió pronto en un peso pesado del vestuario. El cántabro repasó ayer los últimos acontecimientos en el Villarreal y habló claro sobre el reciente cambio en el banquillo: «Con Calleja tenemos una forma diferente de jugar, nos pide cosas distintas; cuando cambia el entrenador parece que cambie el chip con una varita mágica».

El central no esconde su predilección por el nuevo estilo: «Ahora jugamos más por dentro, presionamos más arriba y creamos más ocasiones. Espero que esto sea para largo». De todas formas, Álvaro no esconde también que hay cosas que no cambian con el nuevo entrenador: «Los defensas mantenemos muchos conceptos y la línea de cuatro, aunque ahora sí se puede ver que arriesgamos más en la salida de balón».

También incide en que los centrales deben estar más atentos a la hora de ayudar a los laterales: «Al acumular más gente por dentro, los carrileros en ocasiones tienen toda la banda y están más expuestos, aunque tenemos jugadores para jugar así y tendremos más ocasiones que antes».

Lo que sí tiene claro Álvaro González es que «estas dos semanas de parón vendrán bien para asimilar conceptos», aunque incide en que ya hay mucho camino recorrido en este aspecto: «Tenemos que encontrar la regularidad, pero el equipo está fuerte y no tiene dudas; sabe lo que tiene que hacer en cada momento. Nos tenemos que fijar en el partido contra el Eibar para crecer».

SU SITUACIÓN PERSONAL // Como ya sucediera el pasado curso, el de Potes se ha convertido en pieza importante y no esconde su satisfacción en este aspecto: «Es la recompensa al trabajo. Cuando llegué no sabía lo que iba a jugar y este año ha pasado lo mismo. Trato siempre de buscar un puesto en el once y estar a un gran nivel para ayudar al equipo».

Respecto al duelo contra el Girona del próximo domingo, el futbolista del Villarreal espera «un partido duro y con un rival de la mayor exigencia». El Girona, asegura, es «muy competitivo tanto en casa como fuera, es un equipo al que cuesta mucho ganarles. Es un buen equipo, con jugadores muy peleones y competitivos, que te van a exigir al máximo», concluyó.