Ochenta y cinco días después, vuelve el fútbol, el de verdad, el oficial, a Castalia. Han pasado casi tres meses desde aquel 4-2 a la Peña Sport con el que el Castellón soñaba con meterse en la tercera y última ronda por el ascenso a Segunda B, pese al estado terminal del club, el mismo tiempo que el nuevo grupo de gestores e inversores han cambiado la faz del albinegrismo. Empieza un nuevo proyecto, más bien una nueva era, cuyo único objetivo, como el de los seis anteriores en Tercera, es volver, de una vez por todas, a Segunda B. La primera piedra en el camino, que estará flanqueado por los 9.300 socios, es el Buñol (19.00 horas).

Buñol es una localidad de menos de 10.000 habitantes, en el camino más rápido entre Valencia y Madrid, conocida, incluso mundialmente, por su tomatina, fiesta del color (rojo, naturalmente) que viene de celebrarse el pasado miércoles. Es muy posible que su equipo de fútbol no llegue a ser tan popular, pero sí quiere dar un paso al frente, dejando de ser un simple aspirante a la permanencia para buscar, sin disimulo, convertirse en una alternativa al elevado elenco de aspirantes a los play-off. Es lo que se desprende de sus fichajes, tan conocidos como Raúl Fabiani o el benicense Jesús López, que se unen a los Pablo Vidal, Álvaro del Moral...

Este grupo de jugadores, que si bien no llega al nivel de la competitiva plantilla del Castellón, sí suponen un peligro que amenaza con transformar la que está llamada a convertirse la primera fiesta de los centuriones, en un remedo de tomatina.

DUDAS // Con todo, no espera Frank Castelló un partido de poder a poder, sino dominador, con un contrincante buscando al delantero ecuato-guineano y las segundas jugadas. Con todo, el bocairentí tiene la llave que conduzca a la primera victoria en casa, encadenado al 0-1 frente al Elche B de hace siete días.

No parece Castelló, esta temporada, muy dado a repetir onces de una jornada a otra, antes, incluso, de que encadene la secuencia de partidos domingo-miércoles-domingo. El regusto que le dejó el encuentro ante el filial franjiverde y los problemas de tres de los titulares en el Díez Iborra le dan pie a hacer cambios.

Habrá que ver cómo está Arturo Navarro del golpe, así como los enfermos Jordi Marenyà y Kike Ferreres. Las ausencias seguras son Abraham Peleteiro (descuenta ya el último mes de su posoperatorio) así como William Domingues, todavía no autorizado a jugar, a expensas del tránsfer.

¿Qué variación habrá? ¿Apostará por la defensa de tres que tanto debate ha generado este verano? ¿Quiénes serán esta vez los descartados, dentro de una plantilla tan amplia? Castellón por fin respira fútbol, primordial en búsqueda de los objetivos.