Historias de amor y desamor en El Collao. Óscar Cano y Elías Martí, además de tres jugadores del Castellón, han militado en el Alcoyano. Un paso que, para bien o para mal, porque les fue genial o todo lo contrario, marcó a Óscar Cano, Elías Martí, César Díaz, Rubén Ramos y Kilian Morante. Una etapa que, además, no todos podrán rememorar sobre el césped este domingo, puesto que el madrileño está sancionado y el alicantino lleva tres meses sin jugar.
Oscar Cano y Elías Martí
Vayamos por partes. El Alcoyano escogió a Óscar Cano en junio del 2014. Lo cierto es que la propuesta del granadino no llegó a calar en la afición peladillera, acostumbrada a un juego más aguerrido: un fútbol más retro, a tono con el vetusto estadio. Los resultados le mantuvieron a duras penas en la primera vuelta, pero el deficiente inicio de la segunda (cuatro empates en los primeros siete encuentros), unido a una derrota contra el último, derivaron en una destitución junto a su segundo entonces, Guillermo Fernández Romo (ahora, a los mandos del Ejea). El preparador físico Elías Martí actuó de interino hasta la llegada del tándem Carlos Sempere-Andrés Palop.
César Díaz
César Díaz, que pasado mañana tiene la posibilidad de marcar por quinta jornada consecutiva, apareció en El Collao en diciembre del 2007, todavía con 19 años, cedido por el Albacete, entonces en la categoría de plata.
Sin embargo, el delantero de Villamalea no se fogueó en exceso en Segunda B: únicamente 215 minutos repartidos en hasta 10 encuentros y un gol, paradójicamente también en el campo del Lleida (como en la última salida del Castellón), si bien entonces no impidió la derrota de los blanquiazules. Terminada la cesión, regresó al Albacete, donde no volvió a contar: rompió su vinculación y empezó su peregrinaje por Zamora, Sangonera, Almería B, Teruel, Melilla... antes de regresar por la puerta grande al Carlos Belmonte, devolviendo a los manchegos a Segunda A.
Rubén Ramos
Es otro treintañero que ha rodado mucho desde que empezase a despuntar en la cantera del Real Madrid. Curiosamente, se incorporó al Alcoyano en el mismo verano que Cano pero, a diferencia del entrenador, el creativo mediapunta de Leganés aguantó dos campañas en el equipo del montañoso interior alicantino, a un muy buen nivel, además: fue indiscutible en la 2014/2015 con 36 encuentros; en la siguiente, aun sin jugar tanto, también participó en 26, dando el salto, cualitativamente hablando, al Murcia en julio del 2016.
El ex del Internacional de Madrid, que viene de ver cinco amarillas en las últimas cinco jornadas, será una llamativa baja.
Kilian Morante
El jugador albinegro con un pasado más reciente en el Alcoyano es el extremo de Orihuela.
Kilian se incorporó al conjunto blanquiazul en el verano del 2017, con un protagonismo que fue in crescendo a lo largo del pasado ejercicio, que cerró con 22 apariciones en el equipo y tres goles. Se convirtió en un cotizado sub-23, hasta el punto de que el Castellón se fijó en él. Jugó en 13 de los 19 partidos de la primera vuelta, pero desde la visita al Mini Estadi del Barcelona B, ha desaparecido por completo: ni un minuto más.
