El Real Madrid aspira a convertirse en el primer equipo que reedita el Mundial de Clubs, en el regreso de la competición siete años después a Emiratos Árabes Unidos. Tiene el cartel de gran favorito encara las semifinales ante el anfitrión, el modesto Al Jazira (18.00 horas, TVE-1). Tras convertirse en el primer club en la historia de la Champions que conquistó dos ocasiones seguidas el trofeo de mayor prestigio, el equipo de Zidane encara otro reto y la posibilidad de firmar un nuevo récord. Nadie conquistó dos Mundiales de Clubs consecutivos. Sería el broche a un 2017 repleto de alegrías para el madridismo.

Después de recuperar el trono perdido en la Liga y conquistar la Champions, las Supercopas de Europa y España aumentaron en el presente curso a cuatro los títulos del 2017, que los blancos quieren cerrar en Abu Dabi en cinco, en la que sería la conquista de su tercer Mundialito para igualar a su eterno rival, el Barça.

VUELTA DE BALE // Para este estreno, Zizou recupera a jugadores importantes. Lo primero, el regreso de Bale, superadas las molestias en su punto débil, el sóleo izquierdo. Apunta a reaparecer durante la competición, pero no directamente de titular, por lo que Isco regresará a su posición.

El Madrid ofreció ante el Sevilla la mejor de sus imágenes de la temporada... sin jugadores de la importancia de Carvajal, Ramos, Casemiro, Isco ni Bale. Ese 5-0, en una primera parte memorable, impulsa el ánimo de la plantilla para escapar de la irregularidad y llegar lanzado al Mundial de Clubes y el clásico frente al Barcelona que cerrará el año.

Con Keylor Navas en portería rindiendo ante los rumores --cada vez más fuertes-- de la llegada inmediata de Kepa (Athletic), regresa Carvajal al lateral derecho y las dudas están en el centro de la zaga. Varane parece recuperado y es Ramos el que ahora tiene unas molestias en un gemelo que pueden hacer jugar a Nacho.

De centro del campo hacia adelante todo parece definido, a no ser que Zidane sorprenda con rotaciones o insista con Lucas Vázquez para mantener el 4-4-2 con extremos, que le dio buen rendimiento el sábado. Vuelve Casemiro a las espaldas de Modric y Kroos. En punta, Benzema necesita goles y Cristiano Ronaldo quiere extender su racha tras una semana de oro en la que se convirtió en el único que ha marcado en cada jornada de una fase de grupos de Champions, recibió su quinto Balón de Oro y finalizó su sequía liguera con un doblete.

El que sí que es seguro que disputa la final del sábado es el Gremio de Porto Alegre: los brasileños doblegaron a los mexicanos del Pachuca, ayer en la prórroga, con un gol de Everton (1-0).