Un gol de Ángel Rodríguez en el tiempo añadido dejó helado anoche al Real Valladolid, en un partido de poco fútbol en la primera mitad y de dominio en la segunda del equipo madrileño, que pudo abrir el marcador antes si no hubiese sido por el acierto del portero Yoel Rodríguez.

El horario, la fecha y la baja temperatura provocaron que el partido no resultara muy atractivo para la afición azulona, que apenas superó los 6.000 espectadores.

El duelo se resolvió en el minuto 92, tras una buena jugada en ataque que inició Samu Saiz al abrir el balón a Jorge Molina y este, ante la salida de Yoel, puso un centro para que Ángel rematara de cabeza al fondo de las mallas.