Por fin vio la luz al final del túnel el Villarreal C. El segundo filial amarillo, gracias a un gol del canario Juan Carlos Arana, se impuso en el campo del Silla y rompió una mala racha de seis encuentros consecutivos sin saborear una victoria. Atrás queda aquel 22 de diciembre pasado donde el equipo de Pere Martí había ganado su último partido al Acero (2-1). Luego se estrenó el 2020 y hasta ayer el segundo filial no había vuelto a ganar
Ganaron, sí, pero con sufrimiento. La diferencia era tan exigua que el mínimo despiste podía pasar factura. En el Vicente Morena el equipo blanquet suele apretar mucho a sus rivales. Y el partido se tornó duro e intenso, como lo demuestran las 11 amarillas que tuvo que mostrar el meticuloso colegiado valenciano Jonathan Navarro Paterna.
El Villarreal C saltó al terreno de juego apretando fuerte. Y el canario Juan Carlos Arana avisó dos veces antes de establecer el 0-1. No pudo ser en el minuto 8 ni en el 19, pero sí en el 35. Buen pase de Víctor Narro sobre Arana, y éste cruzó a la perfección ante la salida del portero Lucas Parra. Ese gol, a la postre, fue suficiente para lograr la trabajada victoria.
En la segunda parte el local Verdú estrelló un balón en el palo de la portería del andorrano Iker Álvarez (min. 53) y cinco más tarde fue Brian el que erró otra acción. A partir de ahí mucha incertidumbre. El 0-1 podía peligrar, pero los pupilos de Pere Martí se mostraron seguros, bien ordenados y evitaron el gol del Silla.
Se añadieron cuatro minutos más. Los valencianos se quedaron con diez por la expulsión con roja de David Verdú (min. 91) y a partir de ahí se acabó el Silla y el partido. Los tres puntos se vinieron a Vila-real. El próximo sábado a las 17.00 horas el Villarreal C recibirá al Alzira en el Mini.
