Ariadna Edo, con unos espectaculares últimos 50 metros de carrera, terminó en tercera posición en los 400 libre (S13) y se colgó el bronce, por lo que en su primera participación en unos Juegos Paralímpicos estrena su casillero de medallas.

La castellonense fue de menos a más y tras marchar en quinta posición en los primeros metros de la prueba, se instaló en la cuarta plaza, aunque a cierta distancia de la alemana Naomi Schnittger, que marchaba cómoda en el tercer lugar. Pero en el último largo, Edo sacó a relucir su potente final para abortar la desventaja de más de tres segundos que llevaba y superar en el último suspiro --la diferencia fue de ocho centésimas-- a la germana. El tiempo de la nadadora del Club Castalia Castellón fue de 4.43.49, lejos del récord del mundo (4.19.59) que estableció la representante estadounidense Rebecca Meyers.

El bronce de ayer viene a rubricar el buen momento de forma de la castellonense, que repite el éxito del pasado año cuando subió también al tercer cajón del podio en esta misma prueba en el Mundial de Glasgow.

Para alcanzar la final, Edo tuvo que nadar en las series, que se disputaron a primera hora de la tarde en España. Y se ganó la plaza al ser la segunda de su semifinal, superada solo por Meyers, La nadadora provincial logró el billete con un registro de 4.46.78 minutos, lejos de los 4.40.60 con los que se presentó en Río de Janeiro, y que supuso el quinto mejor tiempo de las participantes.

Ahora, sin casi tiempo para descansar, la nadadora castellonense afrontará mañana los 50 libre, lo que será su cuarta prueba en Brasil tras el bronce de ayer, el sexto puesto en los 200 combinado y el 11º en los 100 mariposa. H