La conexión entre Beñat Etxeberria y Aritz Aduriz, el centrocampista generando ocasiones y el ariete transformándolas en gol, remontó al Valencia en San Mamés (2-1) y levantó a un Athletic con muchas dudas en este inicio de temporada ante un rival en plena caída libre que no sabe cómo salir del terremoto en el que se halla inmerso. Con un director deportivo (García Pitarch) de comparsa entre una directiva que solo escucha los consejos del súper representante de jugadores Jorge Mendes y un entrenador en la cuerda floja, al que no se ha tenido en cuenta para fichar y vender en el club, con la hinchada cansada de promesas incumplidas y con el equipo colista (cero puntos en cuatro jornadas), el panorama en la capital del Turia aventura una semana muy movida, que podría acelerar el despido de Pako Ayestaran, renovado hasta el 2018 gracias al respaldo del propio García Pitarch.
Abrió el marcador para el Valencia el joven Álvaro Medrán, a pase de Nani en una incorporación de Martín Montoya por la derecha, pero entre Beñat y Aduriz fabricaron los dos tantos que remontaron el encuentro. El equipo che tuvo el empate en un acción de Munir que Kepa detuvo con una impresionante parada a un remate a bocajarro. H
