Derroche de vigor y eficacia en el Sánchez Piz- juán del Atlético, que destrozó al Sevilla de Montella, su verdugo en la Copa del Rey, para, a una semana de visitar el Camp Nou, reforzar ampliamente sus argumentos para hacer verdadera sombra al Barça en la carrera final por el título de Liga. Una goleada de impacto del equipo rojiblanco para venirse arriba y dejar muy tocado al cuadro sevillista, que se descuelga de la lucha por la zona Champions.

Compareció Diego Costa en estado puro para encarrilar un triunfo sin discusión sobre el cuadro andaluz, que no pudo controlar el espíritu guerrero del hispanobrasileño ni quebrar la compacta estructura de su rival antes de desmoronarse con estrépito para permitir que el conjunto de Simeone se paseara a sus anchas en Nervión, donde no recordaban un repaso parecido.

Todo se precipitó después de casi media hora de dominio estéril del Sevilla, con un porcentaje de posesión en torno al 70%, pero sin lucidez alguna para progresar con peligro hacia a Oblak después de su primera y única gran ocasión nada más comenzar el encuentro. Sacó el portero esloveno ante Muriel, Correa lanzó fuera tras recoger el rechazo y los sevillistas ya no volvieron a aparecer con ciertas posibilidades hasta que se encontraron 0-5 por debajo en el marcador,

Se lesionó Navas y Costa revolucionó la velada tras un enganchón y simulación de agresión por parte de Lenglet. A favor en el marcador, el Atlético se reafirmó en su sólida disposición táctica mientras el Sevilla no acertaba a descifrar la manera de revertir la situación. Desatados los rojiblancos y acongojado su rival, Griezmann inició su festival (incluido un gol de penalti, el 1º de la temporada para los colchoneros).