La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, y el concejal de Deportes, Enric Porcar, se han reunido esta mañana para analizar lo sucedido este domingo en Castalia, cuando se impedía el acceso de socios y aficionados del Castellón a Castalia por miembros de la seguridad privada del club, al parecer siguiendo indicaciones de David Cruz. En dicha reunión también han estado presentes los servicios jurídicos del consistorio, para ver qué medida tomar en contra del presidente.
Tras esta reunión de urgencia, la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, junto a la vicealcaldesa, Ali Brancal, y el concejal de Deportes, Enric Porcar, han resuelto lo siguiente:
"El Ayuntamiento y el CD Castellón firmaron en abril de 2013 un convenio por el que se cedía el uso del estadio al club a cambio de que la entidad se hiciera cargo del mantenimiento del mismo. La vigencia del convenio finalizó el pasado 30 de julio de 2016 y, tras haber mantenido diversas reuniones, no se ha llegado a un acuerdo para renovar dicho convenio, dadas las condiciones que ha transmitido el club: la cesión de Castalia durante 20 años, aspecto que el consistorio rechaza de plano; y que el ayuntamiento se haga cargo de una serie de gastos inasumibles para las arcas municipales.
Ante la decisión del club de impedir la entrada de un grupo de aficionados a una zona del Estadio Castalia, y dado que ha finalizado la vigencia del acuerdo, el consistorio está estudiando iniciar el expediente de resolución de dicho convenio, por expiración de plazo, y proceder, en su caso, al posterior desalojo.
La alcaldesa, Amparo Marco, ha lamentado profundamente los incidentes ocurridos ayer en el estadio municipal y ha afirmado que “el ayuntamiento está con la afición y con la plantilla del CD Castellón. El equipo es un emblema de nuestra ciudad y estamos trabajando para garantizar su continuidad y conseguir que esta situación llegue a buen puerto”.
