El gol suena al ritmo del Bacca-Baka. La pareja compuesta un colombiano y un congoleño se ha convertido en una de las duplas de moda de LaLiga. Carlos Bacca ha caído de pie en el Villarreal. Su adaptación ha sido rápida y ha demostrado que no ha olvidado su oficio de cazador de goles. Un 9 de raza ve puerta en cualquier Liga y él lo es. «Me estoy sintiendo cada vez mejor en el Villarreal. Estoy disfrutando mucho dentro del campo. Lastimosamente, el último año en Milán no pude hacerlo ni dentro ni fuera del césped. Gracias a Dios, ese mal momento se superó y encontré las puertas de este club, que es una familia», asevera Bacca con el tono melodioso de voz que le caracteriza, aunque cuando se pone las botas se transforma en un depredador que asusta a las defensas.

Bacca aterrizó en Vila-real para sustituir a otro delantero de raza como Soldado. El Villarreal es ahora más temible y más letal cara a puerta. «Como delanteros, vivimos del gol. Me trajeron para marcar goles y lo que tengo que hacer aquí es ayudar con ellos. Como delantero, al final de temporada me van a evaluar por los tantos que meta y voy a trabajar muy duro para cumplir con las expectativas», declara con un mensaje de autoexigencia incuestionable. El colombiano eludía hablar de una única pareja de ataque y recitaba el mensaje de quien respeta a todos sus compañeros. «Todos trabajamos para estar disponibles para el entrenador y rendir en el campo. Tanto Sansone como Ünal y Bakambu estamos para aportar, y nos están saliendo bien las cosas», manifiesta.

Después de un inicio poco afortunado, el Villarreal ha logrado revertir su mal comienzo con tres victorias consecutivas en Liga y Europa League. «Estamos muy satisfechos por la dinámica que se reafirmó con el gran triunfo en Vitoria», dice Bacca, que promedia 0,5 goles por partido. El cambio en la forma de afrontar los encuentros de las últimas semanas ha sido visible y ello ha redundado en triunfos: «Estamos disputando los partidos con otra mentalidad y a base de buen juego y sacrificio los estamos sacando adelante».

«Los comienzos en Liga fueron difíciles. Tuvimos enfrente a un gran Levante y a una gran Real, pero sabíamos que las cosas iban a salir bien. Además tenemos la confianza del entrenador y liderados por él todos sabíamos que íbamos a revertir ese momento malo», continúa Bacca, que desvela el secreto de su constante romance con el gol: «Siempre que estoy en el área debo tener tranquilidad y frialdad y estar pendiente del balón para que cuando se dé la ocasión meterla. No le quito la mirada al balón hasta que sea injugable, ese es el secreto». Palabra de Bacca. La música del Bacca-Baka seguirá sonando con ritmo colombiano.