La concatenación de partidos empieza a causar serios efectos colaterales en forma de lesiones. Era lo previsible, pero el Villarreal había aguantado bien durante las siete jornadas disputadas después de la suspensión de la competición por la pandemia del coronavirus. El primer futbolista en caer fue Ramiro Funes Mori, pero el central argentino se lesionó en los primeros días de entrenamiento. No obstante, la buena racha concluyó y la peor factura de la goleada recibida ante el Barcelona no fueron los cuatro tantos encajados por Asenjo, sino los problemas musculares que obligaron a ser sustituido a Paco Alcácer, en el minuto 34, y en la segunda parte a Carlos Bacca, quien precisamente había reemplazado a su compañero de ataque tras el contratiempo. De un golpe, y en el breve espacio de media hora, Calleja se quedó sin dos de sus delanteros.

ROTURA DE ISQUIOS // El club amarillo confirmó ayer por la tarde que Bacca se perderá el resto de la temporada, mientras que Paco Alcácer será más que seria duda para Getafe, y si no se quiere arriesgar lo probable es que se le reserve para el partido ante la Real Sociedad del lunes 13 de julio en el Estadio de la Cerámica.

Calleja solo tendrá un delantero del primer equipo disponible para Getafe: Gerard Moreno. Una de las posibilidades que tiene el técnico es situar a Samu Chukwueze en una posición mas adelantada. Otra es contar con el joven canterano Fernando Niño, que ya marcó dos goles con el primer equipo antes del parón, uno de ellos decisivo para lograr la victoria en Vitoria ante el Alavés, y el otro en la Copa de Rey en Vallecas frente al Rayo. Otro dato importante es la situación de Gerard Moreno, al borde de la suspensión por tarjetas desde hace unas jornadas y cuya posible baja complicaría más las alternativas en la delantera grogueta.

El entrenador amarillo esperará hasta mañana para tomar la decisión de si convoca o no a Alcácer, puesto que la expedición viajará el mismo día del partido y regresará tras el mismo.