El Barça no nota los efectos del exigente calendario que ha afrontado este mes de enero. Y si los ha notado, no han repercutido en los resultados, que a fin de cuentas es la vara de medir de cualquier equipo. El Barça va ganando partidos sin descanso. Desde que regresó de Japón, con el reluciente Mundial de Clubs que cerró un ciclo de cinco títulos conquistados de seis posibles, el equipo no ha aflojado la marcha. Nueve victorias y un empate (en el primer partido del año), certifican que el cansancio no pasa factura. Y que la tesis de que una eliminación copera puede ser beneficiosa, como defendieron voces madridistas tras el ridículo ante el Cádiz, no se sostiene.

Con el cambio de mes, no cambia el panorama del Barça, El ritmo no se afloja. Febrero ofrece la misma cantidad de partidos que enero: dos por semana. Con la semifinal ante el Valencia acabará la Copa hasta el 21 de mayo si el equipo se clasifica para la final, pero reaparecerá la Champions y quedara el partido pendiente de Liga con el Sporting de Gijón que se aplazó en diciembre.

UN CASO ETERNO // Tampoco cambian las vicisitudes judiciales del club, en el eterno caso Neymar y sus derivadas. Entre hoy y mañana desfilarán por la Audiencia Nacional Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, los dos últimos presidentes, y Neymar, a cuenta de la última demanda que presentó la compañía DIS, un fondo de inversiones que poseía el 40% de los derechos del delantero.

La firma presentó en junio una demanda por un supuesto delito de estafa y corrupción por entender que fue engañada por el Barça y el Santos. Los clubs anunciaron que la operación se cerró por 57,1 millones de euros (40 fueron para N&N, de la familia Neymar), cuando las investigaciones posteriores revelaron que el montante supera los 83,3 millones. La Fiscalía reclamó la declaración de Neymar como imputado mañana, la víspera del primer duelo copero frente al Valencia de Neville.

“NO SON MÁQUINAS” // El proceso judicial no ha afectado a la estrella brasileña, que suma 21 goles en 27 partidos. Aunque no marcara ante el Atlético, arrastrando aún molestias por un pisotón en el pie derecho sufrido ante el Athletic. La falta de descanso le impidió recuperarse del todo. No ha impedido al Barça, sin embargo, mantener su velocidad de crucero que le ha permitido alejarse del Atlético y el Real, sus más inmediatos perseguidores en la Liga. Neymar no marcó el sábado. Peor no faltaron los goles del tridente. Los de Leo Messi y Luis Suárez, que aportan 21 y 31 cada uno, respectivamente.

“Los jugadores no son máquinas”, dijo Luis Enrique, a medio camino de la reivindicación -por el mérito del triunfo- y la hipotética protesta que pudiera haber por la superioridad del Atlético en algunos pasajes. “Estamos mal acostumbrados”, añadió. H