Cinco integrantes de la primera plantilla del Barcelona acudieron ayer a las instalaciones de la Ciudad Deportiva Joan Gamper de Sant Joan Despí, pese a que el técnico Luis Enrique había concedido jornada de descanso. Los jugadores que trabajaron en su día libre fueron Aleix Vidal, Jeremy Mathieu, Javier Mascherano, Andrés Iniesta y Jordi Alba.

La mayor parte de ellos se trataba de futbolistas que se encuentran en pleno periodo de recuperación de lesiones, como es el caso del capitán culé, que espera estar recuperado de sus molestias cara al próximo partido frente al Villarreal (18.30 horas, en el Camp Nou). Mientras, Mathieu y Aleix Vidal tienen problemas de lesión de mayor duración.

UNA SEMANA DE ‘RELAX’ // También estuvieron en Sant Joan Despí tanto Mascherano como Alba, quienes, en un principio, se encuentran a plena disposición de Luis Enrique, pero que no han querido estar tantos días inactivos. No en vano, el asturiano había concedido dos jornadas de asueto a su plantilla, aprovechando que esta semana no tienen un compromiso, al haber quedado apeados de la Champions en los cuartos de final ante la Juventus.

En consecuencia, será la primera vez en mucho tiempo que dos encuentros de los azulgrana estarán separados por siete días exactos, después de haberse impuesto el pasado sábado por la noche en el derbi de la Ciudad Condal al Espanyol, en Cornellà-El Prat, por 0-3, gracias a un doblete de Luis Suárez y otro gol de Rakitic.

El Barcelona volverá al trabajo esta mañana, a partir de las 11.00 horas, con vistas al encuentro frente a los amarillos. Los azulgrana jugarán antes que el Real Madrid, que visitará al Granada en Los Cármenes (20.45 horas). Mientras que el equipo de Zinedine Zidane jugará después del choque de ida de las semifinales de la Champions ante el Atlético, el conjunto andaluz ya tiene certificado su descenso a Segunda A y no se juega más que el orgullo profesional, con el estímulo de tratar de sacar algo delante de su público frente a los blancos.

ReCTA FINAL // Empatados a puntos, el Barça (mejor en el cara a cara particular) necesita ganarlo todo y que el Madrid pierda al menos un partido (o empate dos) para apurar sus opciones de revalidar el título. Los culés son líderes, empatados con los merengues, que tienen un encuentro más.