El Barcelona vuelve a la carga para fichar a Philippe Coutinho. Fracasó en verano y lo intenta de nuevo en invierno, aunque el futbolista no pueda participar en la Champions porque la ha disputado ya con el Liverpool. La rotunda oposición del club inglés se ha ablandado y el Barça ve posibilidades de cerrar la contratación del internacional brasileño en los próximos días, por una cantidad que oscilará entre los 100 y los 150 millones de euros.

Coutinho se reunirá seis meses más tarde con Ousmane Dembélé, el otro futbolista llamado a cubrir la baja de Neymar. El Barça pudo conseguir al delantero francés, que hizo fuerza ante al Borussia Dortmund --incluso se negó a entrenarse-- para que se aviniera al traspaso, pero chocó con la intransigencia del Liverpool, cerrado a cualquier negociación pese a las dos ofertas azulgranas: una de 72 millones de libras (81 millones de euros) y otra de 90 millones (101).

IMPASIBLE // Coutinho pidió el transfer request (solicitud formal de traspaso) y se quejó de una lesión en la espalda a comienzos de temporada, pero el Liverpool se mostró indiferente ante la presión. «A última hora, el Liverpool, por fin, puso precio al jugador: 200 millones», expuso Albert Soler, director de deportes profesionales culés, para aclarar el desenlace negativo de la operación.

El Barça, como era previsible, ha vuelto a la carga. Pero no pagará 200 millones. Tampoco los 100 que ofreció en su última propuesta. Tras el fracaso de la anterior negociación, los interlocutores han cambiado. Òscar Grau, el director general del Barcelona, lleva la voz cantante por la ingeniería financiera que requerirá la fuerte inversión económica, ya que se superarían los 222 millones cobrados por Neymar, si se suman los 105 millones gastados por Dembélé. El Barça contempla pagar los 100 millones de la cláusula de Antoine Griezmann el próximo verano, pero esa operación se adscribiría al presupuesto de la campaña 2018/2019 por las limitaciones del fair play financiero. El Barça estará obligado a traspasar jugadores o a aumentar los ingresos de márketing para poder atender esa inversión.

El brasileño, al que solamente le quedarían tres partidos como red, tiene una plaza reservada en el Camp Nou y la camiseta con el 24 libre. A no ser que prefiera el 14 que liberará Javier Mascherano cuando se marche al fútbol chino, aunque su puesto lo cubrirá un central. El candidato es Yerry Mina, colombiano del Palmeiras, con el que hay un pacto para su incorporación el 1 de julio por 9 millones. Ernesto Valverde querría adelantar su llegada por la marcha de Mascherano, pero todo dependerá del precio que exija el conjunto brasileño.