Cambia el año, pero no cambia el Barça. Con la misma soltura y la misma eficacia con que despidió el 2017 goleando al Madrid en el Bernabéu, despachó al Levante al retomar la Liga. Un triunfo por 3-0 como si fuera lo más natural del mundo ante un rival bravo (no perdía fuera de casa desde septiembre), que quiso frenar a los azulgranas con faltas, y que perdió el entusiasmo en cuanto se dio cuenta de que estaba en la casa del líder.

No tardó mucho. Apenas el tiempo que emplearon Alba y Messi para encontrarse en una jugada que repiten partido tras partido. La combinación más provechosa del equipo esta temporada marcó el camino de la victoria. A esa asociación se añadió la que forman Sergi Roberto y Luis Suárez. Las dos parejas, que suman cinco asistencias cada una en la Liga, se han convertido en los principales resortes ofensivos.

EL TALENTO IMPREVISIBLE // Y es que por muy estudiados que se tengan los rivales gracias a la tecnología, el talento, la inspiración, es muy difícil de contrarrestar. Sobre todo, si en el campo está el cerebro futbolístico más privilegiado del mundo. Messi es mucho más que un goleador. Es el motor que arrastra al Barça, un bólido demasiado rápido para el Levante, que quedó abollado en el primer tiempo. Tras el descanso, solo encajó el gol de Paulinho en el tiempo añadido.

Rakitic ejerció de mediocentro ante la ausencia por sanción de Busquets. Por fortuna, estaba Iniesta, insustituible en la sala de máquinas, para marcar el tempo del juego. El renacido Iniesta, tan entusiasmado con la vidilla que le da Valverde que hasta hizo faltas tácticas. Necesarias para atajar las escapadas del Levante, que se concentraron en las fases iniciales de cada mitad. Al principio las frenó Mascherano; luego debió intervenir Ter Stegen para que el soci no se intranquilizara con un hipotético 2-1.

La novedad del 2018 fue la incorporación de Dembélé, que reapareció en Vigo y ayer fue titular por tercera vez en la temporada. Jugó, como en las dos anteriores, allá por septiembre, de extremo derecho. Solo emitió destellos.