El sorteo de la liguilla de la Champions 2018/2019, celebrado ayer en el Fórum Grimaldi de Mónaco, deparó el grupo de la muerte al Barcelona (Tottenham, PSV e Inter serán sus adversarios), tampoco tuvo piedad con el Valencia (emparejado con el Manchester United, Juventus y Young Boys), no fue terrible para el Atlético (tendrá a Borussia Dortmund, Mónaco y Brujas como rivales) y, sobre todo, se mostró muy clemente con el Real Madrid (le tocó la Roma, el CSKA de Moscú y el Viktoria Plzen).

Los blancos comenzarán la defensa del título con un grupo a priori asequible, pese a la presencia de los italianos, semifinalistas la pasada campaña tras eliminar inesperadamente al Barcelona en cuartos de final, que presentan un equipo muy bien reforzado con el habitual trabajo en los despachos de Monchi.

El Barcelona tratará de poner fin a la mala racha que vive en la principal competición continental. Sin embargo, para arrancar, tiene un grupo inquietante, con el pujante Tottenham de Mauricio Pochettino (exjugador y extécnico del Espanyol), el reaparecido para la causa Inter y el peligroso PSV, un excampeón y que también regresa a esta fase.

El Tottenham es la principal amenaza para el conjunto de Ernesto Valverde, que vuelve a partir con la vitola de favorito por el gran equipo que tiene y por disponer de Leo Messi, pero que debe ratificarlo en el campo y no volver a sucumbir antes de tiempo. El cuadro inglés ganó el pasado año el grupo en el que estaba el Real Madrid y tan solo una remontada increíble de la Juventus en octavos le impidió progresar, cuando estaba haciendo una magnífica campaña.

En su regreso a la máxima competición continental, el Valencia, pese a su salto, a última hora, al bombo 3, tendrá que lidiar con dos auténticos huesos como el Manchester United de Mourinho y la Juventus de Cristiano Ronaldo. Los ingleses andan en horas bajas, pero los italianos, sin duda, están en la terna de aspirantes al título, después de varias buenas campañas en Europa. El modesto equipo suizo del Young Boys, sobre el papel, será la comparsa... pero sin descuidarse.

EL ANFITRIÓN NO QUIERE SUSTOS // El Atlético, anfitrión de la final en el Wanda Metropolitano, tiene rivales conocidos. El morbo lo pondrá el reencuentro con su exdelantero Radamel Falcao: el colombiano es la estrella del Mónaco. El equipo del Principado se presenta como la principal amenaza del cuadro rojiblanco junto al Borussia Dortmund, que sigue teniendo señas de identidad de fútbol alegre y juventud en sus filas. El Brujas completa la serie.

Del resto de grupos, destacar que el D, con Lokomotiv de Moscú, Oporto, Schalke y Galatasaray, parece el de menor nivel.

Bayern y Manchester United tampoco deberían sufrir para obtener una tranquila clasificación para los octavos de final, mientras que el PSG de Neymar y Mbappé tendrá que vérselas con el Nápoles y el finalista de la última edición, el Liverpool.