Joan Barreda (Honda) ganó este sábado la séptima etapa de motos del Dakar 2018, pero llegó a la meta muy dolorido y con la rodilla izquierda lesionada por una caída en el último tramo del recorrido.

Barreda, que completó los 425 cronometrados de la especial del día, entre La Paz y Uyuni (Bolivia), en 5 horas, 11 minutos y 10 segundos, se fue directo a la enfermería una vez llegó al campamento del final de la etapa.

El francés Adrien Van Beveren (Yamaha) fue segundo a 2.51 minutos de Barreda, con lo que recupera el liderato de la clasificación general, en detrimento del argentino Kevin Benavides (Honda), que fue tercero, a 8.02 minutos. El tercer puesto es ahora para Barreda, a 4.45 minutos.

No obstante, su continuidad en el Dakar es una incógnita, ya que el ligamento de la rodilla se ha visto afectado y apenas puede apoyar el pie en el suelo. "Se me ha caído la moto encima y desde el primer momento no podía levantarme con la pierna". Una vez en la meta: "Han visto que hay líquido, que el ligamento externo está bastante inestable. Vamos a ver si se puede estabilizar con un vendaje. Probaremos, pero no sé si podré seguir".