El fútbol sala provincial está representado en Segunda División Nacional femenina, una temporada más, por el Bisontes Castellón. Y el equipo de la capital de la Plana apunta alto esta campaña, ya que ha cerrado la primera vuelta de la competición en el grupo II en la quinta posición, a un punto de los puestos de Copa de la Reina y a ocho de los play-offs de ascenso a Primera.

«Siempre digo que si podemos soñarlo, con trabajo, esfuerzo y sacrificio se pueden conseguir muchas cosas, pero siempre con los pies en el suelo porque la humildad es la base de toda grandeza», explica la entrenadora de la plantilla, Ana Cabello.

Estar ahí a estas alturas de la temporada no ha sido fácil. El equipo ha vivido un importante proceso de «adaptación y cohesión» en la primera vuelta, pero las jugadoras han respondido a la perfección y han sumado 26 puntos en quince partidos, con un balance de seis victorias, ocho empates y una única derrota.

«Es cierto que estamos en una competición en la que mandan los resultados, pero, en nuestro caso, la primera vuelta ha sido de mucha adaptación, formación y cohesión porque, ganar o perder es nada más que un resultado, pero lo que hemos aprendido es mucho más positivo que tener solo una derrota», añade la preparadora vila-realense.

La Segunda División es «una competición semiprofesional», en la que las deportistas han de compaginar los entrenamientos y los encuentros con su vida personal y laboral, y eso comporta una dificultad añadida.

«Ha sido un inicio muy complicado. Una cosa es decirlo y otra, vivirlo, más aún teniendo en cuenta las dificultades propias de la competición. Quizás lo que más nos ha costado ha sido el tema de adaptación a la categoría, los inconvenientes que se nos pueden presentar con la compaginación laboral y la fusión entre las jugadoras, el conocernos por ambas partes y saber que queremos ir todas en la misma dirección», detalla la experimentada entrenadora de Vila-real.

Cara a la segunda vuelta, la entrenadora de Bisontes espera que sea «mejor» que la primera, ya que eso será señal de que siguen «creciendo como equipo». «No hay que perder nivel. A veces no se trata de ganar o perder un partido sino de crecer a base de trabajo duro», apostilla.

«Espero y confío en que sigan creyendo las unas en las otras, que a día de hoy lo están demostrando, y que vayamos juntas en la misma dirección con el mismo objetivo. Para mí es el objetivo es crecer como equipo y cada día que seamos mejores», añade la entrenadora, Ana Cabello.