Nunca antes durante su trayectoria en la máxima categoría el Villarreal recibió a un Madrid tan castigado por los problemas físicos como el que hará hoy acto de aparición en La Cerámica. Los de Zidane ya han ganado el partido de las bajas, y por goleada. Mientras que Javier Calleja solo ha tenido que sufrir el contratiempo en su plantilla de la grave lesión de Alberto Moreno —se unirá por espacio de unos dos meses al habitual Bruno en la enfermería grogueta— y está pendiente en las horas previas al choque de esta noche de la evolución del lateral derecho Rubén Peña, que ha ido incrementando la intensidad paulatinamente en los tres últimos entrenamientos. Anoche, el lateral derecho lanzaba un mensaje de motivación en las redes sociales —«¡A por los tres puntos!»—, reflejo de su optimismo en lo que respecta a sus opciones de estar, como mínimo, entre los 18 de la convocatoria. En el bando madridista el panorama es muchísimo más desalentador.
Seis bajas en Vila-real
Aunque se había especulado dáis atrás en una posible reaparición de Eden Hazard en Vila-real, el acelerón del internacional belga en su recuperación no ha sido suficiente y el atacante lidera una larguísima lista de ausencias ante el Submarino. La suya, por supuesto, es la más relevante, pero que Zidane no pueda disponer durante el choque de hoy del talento de James o Isco es ya un punto a favor para el Submarino.
Benzema y Bale serán los referentes ofensivos de un equipo que tampoco ha podido ver todavía el debut en la presente Liga de Marco Asensio, el jovencísimo Rodrygo y Brahim Díaz, además de Mariano, aunque en este caso por decisión técnica, ya que el Madrid espera desprenderse del delantero antes del cierre de mercado.
