Su renovación el pasado verano generó dudas entre la masa social amarilla, pero el Villarreal CF sabía para qué lo quería. Daniele Bonera fue elegido por el Submarino para ejercer de cuarto central y, a su vez, para ser uno de los líderes en el vestuario groguet. Su experiencia, 35 años, y su calidad humana —siempre encima de los jóvenes y siendo una de las alegrías del vestuario— le sirvieron para que el ex del AC Milan —estuvo 9 temporadas con los rossoneri— permaneciera un año más en La Cerámica.
El principio de campeonato no había sido fácil para el defensa de Brescia, ya que una serie de pequeñas lesiones musculares le impidieron rendir con normalidad, por lo que el técnico Fran Escribá apenas lo había utilizado en tres partidos completos, uno de Copa del Rey y dos en la UEFA Europa League.
el final del túnel / Pero desde el pasado mes de enero, Bonera ya está a pleno rendimiento con el resto de sus futbolistas sanos y en las dos últimas jornadas ha aprovechado sanciones y lesiones de sus compañeros para disputar sus dos primeros partidos de Liga en el presente ejercicio, completando los 90 minutos en ambos y con la portería a cero, ante Granada (2-0) y Sevilla (0-0).
Hace dos jornadas, en el compromiso ante los granadinos, una lumbalgia de Víctor Ruiz posibilitó que el italiano hiciera pareja con Álvaro; mientras que una sanción de este último provocó que ante el Sevilla la pareja de la zaga fuera Víctor Ruiz y Bonera. En ambos choques, el de Brescia aprobó con nota.
Sus apariciones han sido posibles gracias a la lesión de muñeca de Musacchio, por lo que Escribá ha tenido que echar mano de él como solución de emergencia.
Daniele Bonera, que en mayo cumplirá 36 años, finaliza contrato el próximo 30 de junio, siendo su futuro, por ahora, toda una incógnita.
