Bruno Soriano nació el 12 de junio de 1984 en Artana, pero casi tan importante para él como esta fecha quedará para la historia el 22 de junio del 2020. Y es que es este lunes cuando el capitán del Villarreal ha vuelto a jugar a fútbol tres años, un mes y un día después de su último partido. “He pensado muchas veces en tirar la toalla”, afirmaba emocionado el futbolista tras la entrevista concedida a Movistar tras el partido.

El último encuentro de Bruno data del 21 de mayo del 2017. Desde entonces han pasado la friolera de 1128 días repletos de sinsabores y regresos frustrados, como el mismo jugador ha recordado esta misma noche. “No sé muy bien ni qué decir”, comenzaba su alegato sin poder reprimir las lágrimas. “Después de tanto tiempo trabajando, esto es muy importante para mí. Ahora solo quiero intentar ayudar al equipo todo lo que pueda en lo que resta de temporada”, proseguía el jugador de Artana, que tenía palabras para quienes más le han ayudado durante este tiempo: “He imaginado este día muchas veces y esto es una alegría muy grande para la gente que me ha ayudado en el club, la afición, mi familia y mi novia. Todos han estado conmigo”.

No oculta el internacional español de 36 años que “hubo muchas decepciones seguidas”, por lo que se congratula de poder ayudar a ‘su’ Villarreal en este tramo final de Liga: “El tiempo que me dé el míster, sean cinco minutos o lo que sea, lo daré todo, iré al máximo”. Sobre su estado afirma que no sintió “ninguna molestia” durante el tiempo en el que estuvo en el campo y a la hora de valorar el empate 2-2 frente al Sevilla concluyó: “Es un equipo fuerte con muy buenos jugadores y este empate no sabe mal del todo. Intentaremos ganar el siguiente contra el Valencia”. Con él sobre el campo será más fácil. ¡Benvingut Bruno!