El buen hacer de Pau Francisco Torres no bastó. Pese a las buenas prestaciones del defensa central del Villarreal, la selección española cayó anoche en Kiev ante Ucrania (1-0), de forma injusta por la multitud de ocasiones que dispuso la Roja, y vio cómo se truncaba una racha de 14 partidos consecutivos sin conocer la derrota. El zaguero del Submarino volvió a ser titular en el eje de la zaga, junto a Sergio Ramos, y se consolida como el elegido por Luis Enrique para convertirse en titular del combinado nacional.

España perdió un partido un año y once meses después, la primera derrota en la Liga de Naciones y de su historia ante una Ucrania repleta de bajas, que castigó con un tanto de Tsygankov la falta de un goleador que premiase un dominio improductivo de la Roja.

SE NOTÓ LA AUSENCIA DE GERARD / Luis Enrique no tiene un 9 puro, un matador de área. Asegura que prefiere tener más variantes de jugadores con perfiles variados para llegar al gol, pero un solo tanto a favor en sus tres últimos partidos invitan a explorar la búsqueda de un punta referencia. Encuentra nuevos registros en una evolución del estilo del éxito, dando paso a las dos últimas sensaciones de la selección. Ansu Fati asentado como titular con 17 años y Adama Traoré como futbolista de perfil diferente, aportando desborde continuo pegado a la cal.

Al dominio abrumador de posesión, España le añade variantes. Por el camino debe encontrar un rematador, porque con Adama se asegura una superioridad física insultante sobre su marcador y centros buscando un goleador. Por ahí apareció Rodrigo Moreno, que dejó un testarazo repleto de potencia a centro milimétrico de Jesús Navas para que Bushchan dejase la parada del partido. Mientras crece Gerard Moreno y se espera la evolución de Álvaro Morata, en Kiev el partido pidió a gritos un punta de los que no había en el campo ni en el banquillo.

Ganó verticalidad España con la apuesta de Luis Enrique, juntando la electricidad de Adama con el desequilibrio de Ansu. El primero debía demostrar que es más que un revulsivo para partidos atascados. Lo hizo con autoridad. Su amigo de 17 años hasta pone faltas laterales y saques de esquina. Libertad desde el banquillo al jugador, pero cuando apareció donde hace daño, perdonó.

Pero ni con ellos en la primera mitad, ni tras el descanso con la entrada de Oyarzábal, Dani Olmo y Ferran Torres, España encontró el camino del gol.

En el minuto 76 fue España recibió el mazazo. De un saque de puerta en largo, con fútbol directo. La visión de Yarmolenko, Jesús Navas enganchado sin tirar el fuera de juego y De Gea en tierra de nadie. Tsygankov firmaba el tanto de la proeza y la Roja caía con Sergio Ramos como jugador más peligroso en área rival, como un verdadero delantero centro. El andaluz tuvo dos, pero las falló.

El empate de Alemania convertía en mal menor la derrota. Las dos selecciones se jugarán el pase a la fase final en Sevilla.