No se ganó, pero tampoco se perdió en la visita del Villarreal al campo del Real Valladolid. El José Zorrilla es un estadio muy peculiar y no se puede asaltar con excesiva facilidad. Más si cabe teniendo en cuenta que el conjunto de la Plana Baixa acudía a esta cita tras el duro mazazo de la eliminación de la Copa del Rey en el campo del Mirandés. De este modo, todo lo que sea puntuar lejos de casa es muy bueno, siempre y cuando después se gane como local. En su caso, en el Estadio de la Cerámica.
Javi Calleja, entrenador del Submarino, dijo nada más sentarse en la sala de prensa que «hay que darle valor al punto sumado lejos de casa, y más por cómo se había puesto el partido y de la semana de la que veníamos», destacó el preparador madrileño, quien además agregó que «hemos sacado nuestro mejor fútbol, hemos conseguido empatar y hemos podido ganar».
Ocasión para ganar / Hay que recordar que el Submarino amarillo tuvo varias ocasiones, especialmente una clara protagonizada por Paco Alcácer, para llevarse los tres puntos del José Zorrilla, aunque también las tuvo el conjunto pucelano para haber reducido a nada el botín. «Nos ha faltado acierto, puntería», destacó. «Hemos tenido ocasiones para llevarnos el partido. Los primeros 20 minutos el equipo ha salido afectados por la eliminación en Copa, fuera del partido. En el descanso hemos hablado de que había que cambiar la mentalidad; de ser más valientes e ir a por el partido, con el dinamismo que nos viene acompañando durante toda la Liga. Es lo que nos ha hecho sacar un punto», aseguró el entrenador del Villarreal.
Emoción con el VAR / El técnico de la escuadra grogueta también fue preguntado por la incertidumbre que rodeó al gol de Gerard Moreno, con intervención del VAR. «Para mí era gol. Decían que podía ser una falta de Iborra, pero se ve claro que no hay contacto y a veces eso supone también a nivel anímico un impulso», apostilló el entrenador.
Y ahora toca seguir. Toca pensar en lo que viene y olvidarse de lo qué pasó días atrás. «Nadie puede agachar la cabeza ni ser conformista» y, en su caso, quieren «estar entre los mejores», por lo que seguirán en esa lucha, con jugadores como Rubén Peña, «que siempre da todo lo que tiene» y que ante el Real Valladolid «se ha desgastado y, su ímpetu, ha contagiado a los demás», apuntó el entrenador del Villarreal.
Ahora, a por el Levante /Para Calleja ya no queda otra que pensar en el próximo partido. En la próxima cita que será contra el Levante en el Estadio de la Cerámica, el sábado a las 18.30 horas. Ahí tocará ganar para hacer la media inglesa. «Es un punto fuera de casa que tenemos que hacerlo bueno en nuestro estadio. Tenemos que mirarnos en la gran segunda parte para hacerlo 90 minutos. Hay carácter y el equipo quiere estar arriba», añadió el preparador del Villarreal.
Ayer se aprobó con buena nota tras una semana complicada por el duro mazazo en el torneo del KO. «Era el partido siguiente a la eliminación de Copa, en un campo difícil, ante un rival al que cuesta desajustar y que se puso por delante, pero el equipo no se rindió y ha hecho una segunda parte que ha sido de las mejores en lo que va de Liga», analizó.
