Cuando venían mal dadas y la permanencia parecía una utopía, José Miguel Garrido renovó a Óscar Cano hasta el 30 de junio del 2021, es decir, le otorgó su confianza para lo que restaba de campaña y dos temporadas más. Una decisión que parecía un golpe de efecto para aplacar a aquellos que solicitaban la cabeza del técnico granadino —por lo que hubiera llegado un cuarto entrenador—, al que el máximo accionista reforzó en su poder cara al vestuario y, de paso, ante el enrarecido entorno de Castalia.

Una vez hechos los deberes y habiéndose obrado el milagro de una salvación in extremis en la que no hizo falta ni play-out, y sabiendo que le quedan dos años de contrato, el preparador del conjunto albinegro ya dejó claro en su despedida de la temporada que, con vistas al próximo ejercicio, quería tener mayor protagonismo en la toma de decisiones deportivas. Es decir, voz y voto.

AL MARGEN DE VENTAS

Y con esa confianza que Garrido le ha otorgado, Cano se ha puesto enseguida manos a la obra, mostrándose estar al margen de una hipotética venta del actual propietario a un grupo liderado por el presidente Vicente Montesinos y con empresarios castellonenses.

Ni corto ni perezoso, y a sabiendas de que el Castellón 2019/20 contará con futbolistas importantes para la categoría, como el propio Garrido ha reiterado, tanto Óscar Cano como su segundo y mano derecha, Elías Martí, iniciaron el pasado fin de semana la que ellos bautizado como su «particular Copa», en referencia al play-off de ascenso a 2ª A.

El propósito no es otro que ver en directo las evoluciones y a su vez conocer de primera mano a los jugadores de los mejores equipos de la categoría de bronce. Es decir, rastrear el mercado de futbolistas de nivel para reunir perfiles con vistas a reforzar la plantilla cara al próximo ejercicio.

EN CUATRO ESTADIOS

Tanto Cano como Martí presenciaron hasta cuatro partidos. El primer entrenador estuvo el sábado en el Real Madrid Castilla-Cartagena, en la matinal de ayer presenció el Fuenlabrada-Recreativo de Huelva y por la tarde el Villarreal B-Melilla, mientras que su ayudante, que compartió los duelos del Castilla y Villarreal B, asistió ayer al Atlético de Madrid B-Mirandés. Como el mismo Cano dijo en twitter: «No se puede parar. Hay que hacer lo que quieres y querer lo que haces». El técnico ya trabaja para el proyecto 2019/20.