Óscar Cano dejó claro que se había perdido una batalla, pero no la guerra. El entrenador del Castellón mostró su total confianza en su equipo de cara a la siguiente eliminatoria --cuyo rival se conocerá el lunes-- y aseguró, sin ningún tipo de miramiento, que «tengo claro que el próximo domingo volveré a sentarme en esta sala de prensa y lo haré siendo entrenador de un equipo de Segunda División».

Para el técnico a ndaluz, el encuentro contra el Logroñés había estado muy parejo, habían tenido sus opciones, pero en el penalti «absurdo» cometido por Muguruza cambió el devenir del encuentro cuando parecía que los albinegros ya se veían de vuelta en el fútbol profesional. «Queda mucho camino por recorrer y en el cuerpo técnico tenemos grandes profesionales que se van a dedicar estos días a recuperar a los jugadores para que el jueves vuelvan a volar como han hecho hoy (ayer para el lector)», dijo Cano.

Además, el preparador del conjunto de la capital de la Plana explicó por qué no había realizado los cinco cambios permitidos y se había dejado a David Cubillas, al que muchos reclamaban, en el banquillo. «David solo ha realizado un entrenamiento completo con el equipo prácticamente en el último mes y he considerado que Raúl Alcaina podría darnos esa energía en el área que necesitamos y la verdad es que lo ha hecho bien y ha tenido alguna oportunidad de haber marcado», añadió Cano, que dio la enhorabuena a conjunto riojano por su ascenso a Segunda División. H