Pablo Carreño estará por primera vez en las semifinales del Barcelona Open Banc Sabadell tras derrotar al búlgaro Grigor Dimitrov, número 5 mundial y segundo favorito del torneo por 6-3 y 7-6 (7-4). El tenista asturiano, número 11 mundial, se ha mostrado muy sólido desde el fondo de la pista y, tras arrebatar el primer set a Dimitrov, ha sabido mantener el pulso en el segundo hasta forzar el 'tie break' y ganarlo.

El tenista asturiano que el jueves había salvado tres 'match balls' ante el francés Adrian Mannarino ya había ganado a Dimitrov en tierra en tres de las cuatro ocasiones que se habían enfrentado. "En tierra me siento más cómodo contra el, tengo más tiempo para jugar el punto y prepararlo", ha asegurado Carreño que este sábado se enfrentará al griego Stefanos Tsitsipas que ha protagonizado la gran sorpresa del día al vencer al austriaco Dominic Thiem, número 7 mundial, y finalista del año pasado. El tenista griego, de 19 años y número 63 mundial, había perdido con Thiem en los dos anteriores enfrentamientos este año en Doha e Indian Wells.

Héroe griego

Tsitsipas fue número uno mundial júnior y entró en el top-100 el pasado otoño. Llega a semifinales de Barcelona sin perder un set, con victorias destacadas antes sobre el argentino Diego Schwartzman y a Albert Ramos. Alto (1,91 metros), con un juego agresivo y potente, se entrena desde los 3 años con su padre, Apostolos y su madre Julia Salnikova, ex número 1 soviética y que llegó a estar clasificada 194 del circuito femenino.

Tsitsipas ya es el mejor tenista griego y el que ha alcanzado el mejor ránking desde Konstantinos Economidis que llegó a estar el 112 del mundo, en el 2007. El tenista griego reside en Atenas pero forma parte también del grupo de jugadores que entrena en la academia que dirige el técnico de Serena Williams, el francés Patrick Mouratoglou.