Un aficionado de la Real Sociedad ha escrito una carta de agradecimiento a los seguidores del Estadio de la Cerámica en la que relata la experiencia que vivió junto a su sobrino Lucas de 11 años y su hijo Iker de 5, con el motivo del partido que enfrentó a su equipo con el Villarreal en la primera jornada de Liga.

Dicho aficionado llevó por primera vez al fútbol a su hijo en directo, por lo que se trataba de una experiencia que no iba a olvidar fácilmente, y el resultado no pudo ser más satisfactorio. La carta, que recoge la web de Aficiones Unidas, relata lo siguiente:

Hola, soy un aficionado de la Real Sociedad, de la Selección Española y durante años abonado del Real Zaragoza CF, condición por la cual he asistido a muchos partidos de fútbol en La Romareda y en otros estadios de España siguiendo a la Real y a la Selección Española.

El sábado 18/8/2018 asistí por primera vez al Estadio de la Cerámica a ver un partido. El motivo no era otro que llevar a mi padre, mi sobrino Lucas de 11 años, aficionado como yo a la Real y a mi hijo Iker de 5 años y que era la primera vez en su vida que veía en directo un partido de fútbol.

Por un error mío al coger las entradas en internet acabé en la fila 6 del Gol Norte, sólo que, en lugar de hacerlo al principio de la misma, lo hice justo al final, en el córner, junto a la zona de los VILLARREAL FANATICS.

Les envío este correo con la intención de que les hagan llegar mi gratitud por esa forma de animar a sus colores. Justo antes de empezar el choque, el chico que llevaba la voz cantante, un chico de barba y camiseta azul, comentó a los suyos: ” Aquí hemos venido a animar al Villarreal y nada más que eso. 0 insultos y 0 racismo”. Y lo cumplieron durante todo el partido.

Puedo dar fe que nunca, en ninguno de los estadios a los que he acudido, ni para ver a la Real, a la Selección o incluso en mi asiento de abonado de la Romareda, me había sentido tan tranquilo a la hora de ver un partido con la camiseta Txuri Urdin, y eso que saltamos como locos con cada uno de los 2 goles que metió la Real Sociedad para llevarse los 3 puntos a San Sebastián.

Si tuviera que elegir un campo para que mi hijo Iker volviera a ir por primera vez al fútbol, sería una y mil veces el Estadio de la Cerámica, aunque esté a 3 horas de mi casa de Zaragoza y esos asientos de la esquina, jamás serían considerados como un error, sino como una oportunidad para enseñarle que cada uno puede animar y darlo todo por sus colores pero respetando al contrario, que no enemigo.

Les invito, además, si lo creen oportuno, que hagan público este mensaje por los medios que consideren y reitero mi agradecimiento a toda la familia del Villarreal CF, un club al que le tenía aprecio desde la distancia y al que ahora le tengo mucho más cariño.