El caso Neymar puede haber entrado en su fase final después de que los abogados del Barça y la Abogacía del Estado hayan llegado a un acuerdo para finiquitar el litigio. La junta directiva fue informada ayer del acuerdo entre las partes y el lunes deberá ratificarlo en una junta.

El pacto supone la exoneración penal tanto del expresidente Sandro Rosell como del actual, Josep Maria Bartomeu (el fiscal pedía siete años y seis meses de prisión para el primero y dos años y tres meses para el segundo) y obliga al club a pagar una multa de 5,5 millones por “dos infracciones tributarias delictivas” correspondientes a los ejercicios del 2011 y del 2013; es decir, no haber hecho la retención correspondiente por el traspaso del brasileño.

Con ello, el Barça admite dos delitos tributarios, paga y termina con un proceso que ahora entraba en una dinámica peligrosa para la entidad porque, de alargarse, se debía presentar un aval de 90 millones, una losa económica que dificultaba reforzar el equipo con fichajes e iniciar la reforma del estadio.

UN MAL MENOR // Fuentes del club explican que el hecho de que el caso pasara de la Audiencia Nacional, en Madrid, a los juzgados Barcelona, el pasado marzo, supuso un primer paso en la negociación ya que “el ambiente era otro”, mucho más favorable a la búsqueda de acuerdos. Finalmente, los abogados Cristóbal Martell y José Ángel González Franco, junto con Román Gómez Pontí, director de los servicios jurídicos del club, sellaron el acuerdo que ahora debe ser corroborado por la junta.

REACCIÓN DE LAPORTA // El expresidente Joan Laporta se mostró ayer disconforme con esta solución. “Se equivocan Rosell y Bartomeu si creen que pueden utilizar el dinero del Barça para tapar su mala gestión”, tuiteó, y advirtió que se reserva “emprender acciones legales” contra el acuerdo. El club considera el pacto como un mal menor ya que la fiscalía reclamaba 22,2 millones de euros. Sin embargo, como el club ya llevó a cabo, el 24 de enero del 2014, una declaración complementaria de 13,5 millones, ahora a esta cantidad se le añaden los 5,5 millones de multa como “reparación del daño”, dando por cerrado el caso con el pago total de 19 millones.

LAS CIFRAS DEL TRASPASO // Con el acuerdo, el traspaso de Neymar queda fijado en 17,1 millones, ya que el resto de cantidades pagadas a la empresa del padre del jugador (N&N), como los 40 millones avanzados de prima de fichaje (y otras cantidades hasta los 86,2 millones) son considerados como salario y tributan como “rendimientos del trabajo”. El club, no obstante, admite con el pacto que los contratos presentaban dificultades “interpretativas sobre el perceptor último” de esas cantidades y se asume ahora que ese dinero, excepto el abonado al Santos, es considerado como salario del jugador. La entidad no descarta depurar responsabilidades entre los ejecutivos que participaron en las negociaciones. Lo que quería evitarse a toda costa era alargar más el proceso. H