Castalia registrará un ambiente más propio de un partido de Primera División y superará con creces la afluencia de aficionados de los dos partidos anteriores de los play-off (8.500 frente a la Peña Deportiva y 10.500 contra el Atlético Malagueño). El Castellón lleva ya 12.087 entradas vendidas (quedan las últimas en Preferencia Alta y Tribuna Alta), a las que hay que sumar los que tendrán el acceso gratuito (menores de 5 años sin asiento reservado, jugadores y técnicos del fútbol base...). Y, cómo no, a los que esperan hasta hoy mismo para adquirir su localidad: las taquillas del estadio estarán abiertas, de forma ininterrumpida, desde las 10.00 horas.

Habrá otra fan zone, situada en la calle Huesca. Después, el equipo será recibido, en los instantes previos al arranque del choque, con un estadio a reventar cantando el himno a capela... Todo para que Castalia vuelva a vivir un día inolvidable, que pasa por obtener un buen resultado para la vuelta (el próximo domingo, a las seis y media, en La Bòbila).

Aunque en un registro diferente, muchas autoridades se darán cita en el palco. Espías de clubs de superior categoría, exfutbolistas albinegros, políticos (como el castellonense Vicent Marzà, conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte...)... darán más lustre a esta auténtica final. H