Castalia debe ser talismán para el CD Castellón el próximo domingo, cuando a las 18.00 horas el conjunto que dirige Óscar Cano se mida al FC Barcelona B en la última jornada de liga en Segunda División B. Es la final de las finales para los orelluts, en la que están en juego la permanencia en la categoría de bronce.

De hecho, toda la familia albinegra, tanto desde dentro del club, como entre socios y otros colectivos de aficionados, es consciente de lo mucho que se juega la entidad, ya que tras siete años en Tercera División sería muy difícil de soportar un nuevo descenso, fatídico tanto a nivel deportivo como económico.

TODOS A UNA / Es por ello que tanto el Castellón como sus incondicionales han unido sus fuerzas más que nunca para llevar en volandas al equipo, en una campaña muy complicada para unos futbolistas que llevan un año muy duro en lo anímico y han tenido que convivir siempre con la presión del descenso.

Es por ello que el próximo domingo se quiere reeditar una tarde mágica, como la vivida el pasado 24 de junio del 2018, cuando se logró el ascenso ante el Portugalete con triunfo en Castalia por 1-0, con un estadio repleto que ayudó al equipo a subir.

LLENAZO... O CASI / Esperan que Castalia roce los 15.000 espectadores, que es el aforo del coliseo de la avenida Benicàssim, ya que además de los 13.500 socios con los que cuenta el club albinegro, cuya gran mayoría no fallará, el pasado lunes se agotaron las 1.500 entradas que el club tenía disponibles (regaló dos por abonado hasta fin de existencias). De hecho, en apenas cuatro horas el club se quedó sin localidades.

Castalia jugará un papel muy importante el domingo, cuando el conjunto de Cano pelee por superar al Barcelona B mientras espera que se den a favor alguna de las múltiples combinaciones que le valen para salvarse.