El CD Castellón afronta las últimas horas del mercado de Segunda A con relativa tranquilidad, reforzado por tener una plantilla ya formada y el notable inicio de la temporada (siete puntos en las primeras cuatro jornadas, seis por encima del descenso). Salvo sorpresa, que en este mercado siempre existen (y más aún dado lo atípica de esta ventana veraniega de fichajes, que se ha adentrado en octubre por culpa de la pandemia del covid-19, no habrá movimientos de calado... aunque sí es posible una pequeña sorpresa.

Íñigo Muñoz y Paco Regalón centran los focos en estas últimas horas, aunque todo apunta a que ambos continuarán en una plantilla que debido a que tanto Jesús Carrillo como Paolo Fernandes están con ficha del B (y por tanto, con dorsales por encima del 25), tiene huevo para ambos (otra cosa es el reparto de minutos). El extremo vasco lleva todo el verano en la rampa de salida, aunque no ha habido acuerdo económico para que rescindiera. La situación del central es diferente, después de un año sin jugar por una lesión de rodilla de la que ya está curado, aunque Óscar Cano no cuente con él.

¿FICHAJE?

Con todo, es posible que el Castellón se mueva en estas horas que quedan hasta la medianoche. En todo caso, sería para incorporar a una joven promesa que no se quedaría en la plantilla, sino que saldría cedido en busca de rodaje. Una fórmula que, ahora en Segunda B, el Castellón podría repetir.