El Juvenil A del Castellón aspira a convertirse en un fijo en División de Honor. Si hace dos temporadas logró el ascenso, la pasada campaña selló la permanencia y en el segundo curso consecutivo de los albinegros en la máxima categoría se espera que puedar dar un paso más y los orelluts consigan la salvación sin tantos apuros como el año pasado, cuando tuvieron que esperar a la última jornada para sellar su continuidad.

Para esta temporada regresa el técnico del ascenso. Fernando Campos retoma las riendas del juvenil tras cuajar un gran ejercicio en Preferente con el Castellón B. La plantilla del juvenil ha disminuido su edad media. Se trata de un bloque muy joven, bien preparado y con muchas ganas de progresar. No obstante, la División de Honor es una categoría muy complicada y el primer objetivo del equipo debe ser asegurar la permanencia cuanto antes.

El colectivo se ha renovado enormemente y Campos cuenta con muchos jugadores de segundo año y unos pocos de tercero. Cabe destacar que diversos futbolistas han dado el salto al filial, caso de Ámine, Víctor o Nahum, entre otros, además de algún jugador que ha firmado por un Tercera División, como Rulo con el Buñol.

La salida de tantos jugadores provoca la promoción de otros tantos procedentes del Juvenil B. Ejemplo de ello son Cuenca, Iván, Carrasco, Edgar o Mourad. Este baile de efectivos hace que únicamente dos futbolistas del año pasado continúen en el equipo, Rafa Pino y Felip. Además, la marcha de Bernat Escriche al juvenil del Lugo supone una baja sensible para el equipo.

En el plano de incorporaciones externas la mayoría proceden de los equipos juveniles del Roda y del Acero. Cabe señalar como fichajes más destacados Mario Valcárcel y Gonzalo, futbolistas del Vall de Uxó y de Benicarló, respectivamente. Ambos han gozado de minutos en Regional Preferente en la última campaña. H