Villarreal C y Castellón tiene muy claras sus respectivas estrategias para el, domingo, pelear por los tres puntos, cuyo ganador se llevará, además, la cuarta plaza, sobre todo si son los albinegros, que parten con dos puntos de renta. El segundo amarillo, como es habitual cuando salta al césped del Mini Estadi, tratará de elevar las revoluciones de su fútbol, amparado en la calidad de sus jugadores y sustentado en el dinamismo de sus jóvenes. Los orelluts ya saben que, a diferencia de los que les suele ocurrir (principalmente en Castalia, tendrán que estar preparados para un mayor despliegue físico; de lo contrario, deberán correr detrás del balón más de lo que debieran.

En este aspecto, hay dos jugadores muy concienciados para ese rol. Sobre todo Marc Castells, el mediocentro puro que suele alinear Kiko Ramírez. “Imprimen un ritmo muy alto, que el balón no pare... No tenemos 20 años como ellos, pero sí nuestras armas”, comenta el de Sueca, que considera que “no es un partido definitivo aunque sí clave”. “De ganar, les llevaríamos cinco puntos y el golaveraje. Sea cual sea el resultado, habrá que seguir igual, porque todavía quedarán más de 10 jornadas”, matiza el medio.

SE SABEN LA TEÓRICA // Un discurso calcado al de Juanra Cabrero. “Los cinco puntos de ventaja nos darían algo de desahogo, pero ni siquiera estamos aún en las últimas 10 jornadas”, reseña, en el hipotético caso de que los albinegros, como la pasada campaña, repitan victoria en la Ciudad Deportiva de Miralcamp. “Sabemos que el Villarreal C juega muy cómodo en su casa, pero tenemos claro qué partido debemos hacer”, asevera el de Estivella, que, como sus compañeros, estudiaron ayer un vídeo de cómo se las gastan los jóvenes futbolistas amarillos en el Mini Estadi.

Volviendo a Castells, el mediocentro toma el partido de referencia uno muy reciente, concretamente la última salida, al Nou Camp de Morvedre. “Tenemos que salir como el día del Saguntino, aunque el Mini Estadi no sea el mismo campo, por lo que tendremos más la pelota”, opina. “Deberemos pelear por cada balón como si fuera el último”, dice el de Sueca, algo que también sostiene, a pies juntillas, Juanra. H