El Castellón, empeñado en vivir en el alambre, sacó adelante los primeros tres obligados puntos de la semana, pero con el susto en el cuerpo. Un partido bajo control en el 80, con dos goles de ventaja, que estuvo a punto de tirar por la borda en el descuento, cuando el Paiporta recortó distancias y dispuso del último cartucho para empatar (2-1). Los orelluts sobreviven a un tarde volcánica, donde perdonaron el 3-0 para complicarse la vida hasta límites insospechados ante un rival que tuvo dos palos y dos penaltis (otro para el Castellón, por gentileza del ínclito Morales Yuste). Zagalá se reivindicó parando uno y permite que todo siga más o menos igual, con vistas al desplazamiento dominical en Silla.

Está visto que Castalia no puede vivir ni tres meses tranquilo. La sensación de que el paso de las jornadas era un simple trámite hasta el momento de jugarse los play-off, paso previo y obligado en pos del ascenso, se esfumaron en el momento en que cambiamos la hoja del calendario para que se asomara noviembre y el Castellón ya estaba a ocho puntos del líder y a cinco del cuarto, mínimo exigible para este equipo.

Los albinegros, conjurados en mensajes esperanzadores en las redes sociales, comparecieron con el brío esperado, pero con la poca precisión que le ha llevado a una situación insospechadamente delicada antes de que la competición cumplía su primer tercio. El Castellón abría el campo, intentando encontrar rendijas en el entramado de un Paiporta que dejaba arriba a Contreras y al exalbinegro Pozo, que incordiaban lo suficiente para que el encuentro fuera de una sola dirección. De hecho, la primera ocasión, no buscada, fue un centro-chut sin aparente peligro de Loren que rebotó en el poste y luego en el cuerpo de Zagalá.

GOL DE FONTE // Cubillas obligó a una estirada gatuna de Ángel. El Castellón ganó en profundidad, pero todavía sin mucho remate. El 9 marcó, pero el árbitro lo invalidó por supuesto fuera de juego. Al menos, el partido tenía ya otra pinta, una realidad cuando Marenyà le dio a Fonte una golosina en forma de remate plácido de cabeza a la red (min. 35).

El gol relajó el ímpetu local, ahora más pausado en sus acciones, pero dejó para después del descanso la aparente sentencia. Apenas 18 segundos pasaron para que Javi Serra se cobrara un penaltito que Javi Zarzo transformó en el 2-0, con toda la segunda parte por delante, en busca del primer triunfo contundente de la temporada, recomendable y hasta necesario para un equipo que ha generado demasiadas dudas en el arranque del campeonato. Desgraciadamente, no fue así..

Aún a lomos de la ola por el 2-0, Cubillas rondó en gol en una acción que entre las temblorosas manos del portero y el larguero abortaron. David insistió e insistió hasta el final, pero el gol le fue nuevamente ajeno.

El Paiporta estaba en la lona pero, como en el primer acto, rondó el gol en una acción tan aislada como clara: trallazo de Adrián González al travesaño. Acto seguido, el mismo jugador obligó a emplearse a Zagalá, que tras ciertas dudas, se ganó de nuevo a la grada parando el penalti (bueno, como el pitado a favor, penaltito) cometido por Arturo que Pozo fue incapaz de transformar.

EL DESCUENTO // El partido estaba de cara pero no cerrado. El Paiporta tuvo reiteradas ocasiones para complicar la tarde a los locales, obligados a sufrir hasta el final, después del segundo penalti cometido por Arturo (fue expulsado), esta vez materializado por Contreras. El fantasma del descuento merodeó por Castalia, porque el Paiporta tuvo la última para empatar. Hubiera sido ya muy grave pero… Las cosas siguen más o menos igual, salvado el primer match ball en contra.