El CD Castellón ha pasado de no ganar hasta la jornada 14ª, a convertirse en un equipo invictus, el único del grupo III, al no conocer la derrota en las cinco jornadas iniciales del ejercicio en curso. Una transformación obrada, en muchos casos, con muchos de los jugadores que ya estaban hace un año en Castalia (Álvaro Campos, Joseba Muguruza, Eneko Satrústegui o David Cubillas), aunque no el entrenador y una idea de juego que aparte de ser efectista, es efectiva.

Solo hay ocho equipos (es decir, el 10%) en Segunda B que aún no han perdido. El Castellón es el único del grupo III, como el Internacional de Madrid (comandado por un extraordinario Rubén Ramos --cuatro goles--) del I; llama la atención que haya hasta cuatro en el grupo IV (el sorprendente San Fernando dirigido por Tito García Sanjuán, el renacido Marbella y el descendido Córdoba).

Por tanto, no sorprende la siguiente estadística: el Castellón es el segundo equipo que más ha mejorado de una temporada a otra. Después del debut de David Gutiérrez en la quinta jornada (empate en casa frente al Ebro), los albinegros tenían cuatro puntos, en tanto que ahora son nueve (más del doble). Una faceta en la que únicamente se ve superado por el Sabadell, cuya mejora se cifra en seis puntos.

MEDIA INGLESA // Si bien el Castellón suma más empates que victorias, de cumplir la lógica e imponerse el domingo a las seis de la tarde, en Castalia, al colista Badalona, los albinegros continuarán bajo los designios de la media inglesa, con un registro de dos por partido que le devolverían a la zona de play-off, ya que Andorra y Villarreal B, los dos colíderes, se ven las caras el domingo al mediodía en el Principat.

No es el objetivo del Castellón, que después de verse al borde del precipicio, cuando se había vendido, precisamente, la palabra ascenso, que nadie habla abiertamente de la zona top de la clasificación. El reto es salvarse con mucho menos agobios y a partir de ahí... pues habrá que ver. Los albinegros han descontado ya los primeros 9 puntos a los 45 de la permanencia, situándose cinco por encima de cualquier peligro, antes de haberse enfrentado a la mayoría de los candidatos al ascenso, a esos que están en boca de todos (Gimnàstic, Hércules, Barcelona B...), que, por unos motivos u otros, están por debajo --o incluso muy por debajo--.

Lo cierto es que desde la llegada de Óscar Cano, en los prolegómenos de la 17ª jornada del pasado ejercicio, el Castellón se ha acostumbrado a no perder. Son cinco derrotas en los 27 encuentros con el granadino en su banquillo. El resto son nueve victorias y, eso sí, casi la mitad de esos encuentros, 13, han acabado en reparto de puntos. En total, por lo tanto, el 50% del botín.

RACHA QUE TOCA A SU FIN // El 0-0 en Sant Adrià de Besòs tuvo su parte negativa también. El Castellón no marcó, dejando su racha de jornadas consecutivas viendo portería en 14 (las cuatro de ese ejercicio y las últimas 10 de la pasada campaña), la segunda más prolongada en Segunda B: 16 (de la jornada 30ª de la 1994/1995 hasta la séptima de la siguiente.

La que sí continúa vigente, al menos en lo que a ver puerta se refiere, es la de marcar en casa: 13 encuentros seguidos (no se ha quedado a cero en casa en toda la etapa de Cano en Castalia).