LOS BANQUILLOS. El presidente del Celta, Carlos Mouriño, compareció ayer ante los medios para ratificar a Miguel Cardoso: «El entrenador sigue teniendo toda nuestra confianza». Sin embargo, fue una ratificación a corto plazo, puesto que el dirigente gallego quiso curarse en salud al afirmar que «el fútbol es muy cambiante». El extécnico amarillo Fran Escribá podría ser la alternativa al portugués. r. d.