Habian empatado el sábado el Manchester City, el United, el Tottenham y había perdido el Liverpool, pero el Chelsea no se distrajo ante la desgracia ajena y aprovechó la jornada paraponer distancia con sus principales rivales. Excepto el Arsenal, que también ganó con agonía. La capital acogerá al nuevo campeón de la Premier. Al Chelsea, disparado al frente de la tabla, solo le aguantan el Arsenal (a 8 puntos) y el Tottenham (a nueve).

La jornada dominical devolvió la paz en Stamford Bridge. No solo por la victoria, sino porque marcó Diego Costa tras la polémica que hubo alrededor de una lesión, una exclusión en un partido y su presunto interés por irse a China. Fue titular ante el Hull (2-0) y anotó en el primer tiempo, gesticulando con las manos como si se reivindicara antes las habladurías. Gary Cahill sentenció cerca del final.

DOS PENALTIS EN EL MINUTO 90

Y no fue hasta el final cuando el Arsenal logró la victoria. Dramática a más no poder. Ganaban los 'gunners' gracias a un gol de Mustafi y poco después fue expulsado Xhaka. El Burnley empató de penaltien el minuto 90 y Alexis Sánchez transformó otro en el tiempo añadido.

El relevo del campeón está garantizado porque el actual solo mira por no bajar. La brillante andadura del Leicester en la Champions (será el rival del Sevilla en octavos) contrasta con su lamentable trayectoria en la Premier, por mucho que Ranieri, su entrenador, dijera que el objetivo era mantener la categoría. El 3-0 en Southampton confirma lo vulnerable que es.