¿Hay algo mejor que un séptimo partido en unos playoffs de una liga americana? ¿Hay algo mejor que, además, ese séptimo partido sea en la final? La respuesta es no. Hace más de 40 años que nadie remonta un 3-1 en contra en las Series Mundiales y esta madrugada los Chicago Cubs han igualado la balanza. El equipo de los más de 100 años sin ganar, se resiste a perder.

Jake Arrieta lo ha vuelto a hacer. El lanzador del conjunto de Chicago ha vuelto a dominar a la línea de bateo de los Indians pero esta vez lo más destacado del partido han sido los bates de los Cubs.Kris Bryant adelantaba a los suyos ya en la primera entrada con un tremendo 'home run'. Después, errores defensivos de los exteriores Tyler Naquin y Lonnie Chisenhall acabaron poniendo un 0-3 en contra de los Indians. Entonces Arrieta solo tuvo que salir a eliminar a los bateadores de la 'tribu' con un cómodo cojín.

GRAND SLAM DECISIVO

Josh Tomlin, el lanzador de Cleveland, estuvo muy errático y fue golpeado varias veces. En consecuencia, en la tercera, Dan Otero salió para sustituirle con la presión de tener las bases llenas. Si alguien confiaba en la remontada de los Indians, Adisson Russell disipó toda esperanza. El jovencísimo talento de los Cubs (22 años) conectó un ‘grand slam’ ('home run' con bases llenas) para sumar el 0-7 y convertirse en el segundo jugador más joven en hacerlo en unas World Series (Mickey Mantle, 1953).

Poco pudo hacer el conjunto de Cleveland para dar alguna pincelada de color a tan gris partido. Jason Kipnis golpeó a Arrieta con un doble y, más tarde, un 'home run' en la quinta entrada para maquillar el resultado, 2-7.

POLÉMICA DECISIÓN

Jon Maddon dejó la incógnita del partido. El técnico de los Cubs sacó al campo al ‘closer’ Aroldis Chapman, quien había lanzado mucho en el anterior partido, para evitar que los Indians, que estaban muchas carreras abajo, se acercaran. El lanzador cubano jugó lo que restaba de partido incluso después de que Anthony Rizzo, ya en la novena, bateara otro 'home run' de dos carreras para dar la estocada final a los Indians, 2-9. Travis Wood, último relevista de los de Chicago, substituyó a Chapman solo para hacer la última eliminación del partido.

Maddon quemó de esta manera a su mejor ‘closer’, jugador que podría necesitar esta misma madrugada del miércoles al jueves, cuando se disputa el último y decisivo partido. Los Cleveland Indians se lo jugarán todo con su mejor lanzador, Corey Kluber, con quien no han perdido en estas Series Mundiales. Kyle Hendricks será el encargado de intentar acabar con la sequía de 108 años de los Chicago Cubs.