Thomas de Gendt ganó en Mont Ventoux la duodécima etapa, de 178 kilómetros, una jornada inédita en la que Froome corrió a pie hacia la meta tras un incidente provocado en el ascenso bloqueado por el público. Aun así, tras la reunión de los jueces, conservó el maillot amarillo.
La jornada del Ventoux acabó con un festival de imágenes desconcertantes. Mientras De Gendt levantaba los brazos, en el grupo de favoritos se habían destacado Froome, Porte y Mollema. En el estrecho pasillo de público, Porte chocó contra una moto y cerró el paso a Froome, quien sufrió una avería.
Entonces, el defensor del título optó por correr a pie hacia meta. A continuación, se subió a una bicicleta de asistencia y retomó la marcha. Se volvió a bajar de la bici prestada y ya con una de Sky llegó a meta a 6.45 del ganador y a 1.36 de Quintana. Finalmente, el jurado le dio el mismo tiempo que a Mollema, con quien iba escapado en el momento del incidente. H
