La presión para que el Comité Olímpico Internacional (COI) y Japón pospongan los Juegos de Tokio de este verano se amontona hasta convertirse en un clamor global. Federaciones, atletas y representantes olímpicos han redactado comunicados y realizado declaraciones a lo largo de este fin de semana con el fin de doblegar el empecinamiento público de los organizadores de seguir adelante con un acontecimiento en el que sin duda hay muchas ilusiones depositadas, y muchas inversiones ya realizadas, pero impracticable en estos tiempos de pandemia, encierro, enfermedad y muerte.

Ayer, tras la reunión de la su Ejecutiva, encabezada por el presidente Tomas Bach, se anunció que el COI se ha dado un plazo de cuatro semanas para estudiar qué hacer con los Juegos Olímpicos, «incluyendo el escenario del aplazamiento». «La suspensión no está en la agenda, pero a la luz del empeoramiento de la situación a nivel mundial, la Ejecutiva ha dado hoy (ayer para el lector) el primer paso en la planificación de los posibles escenarios», dice la nota.

«El COI, en cooperación con el Comité Organizador de Tokio 2020, las autoridades japonesas y el Gobierno Metropolitano de Tokio, iniciará conversaciones detalladas para completar su evaluación de la rápida evolución de la situación sanitaria mundial y sus repercusiones en los Juegos Olímpicos, incluida la hipótesis del aplazamiento», señala el primer organismo deportivo mundial.

Además, desde el COI se confía en que «habrá finalizado estas discusiones dentro de las próximas cuatro semanas» y aprecia «mucho» la solidaridad y la colaboración de los comités olímpicos nacionales y de las federaciones internacionales «para apoyar a los atletas y adaptar la planificación de los Juegos».

¿SIN PÚBLICO? / Entre las opciones figuran reducir los Juegos o mantenerlos sin espectadores, pero a la vez se debate ya internamente sobre el gran tabú, el aplazamiento, que podría ser de uno o dos años. La decisión final corresponde al COI, aunque la voz de Japón resultará importante. No se sabe cuándo caerá la fruta, pero la presión para no prolongar más la incertidumbre crece cada día y podría ser cuestión de horas.

A lo largo del fin de semana se han escuchado peticiones de todas partes del mundo. Una detrás de otra, se han pronunciado en favor de la suspensión las federaciones de EEUU de natación y atletismo, el Comité Olímpico de Brasil, Serbia, Noruega y Croacia, el atletismo español, francés y británico, y también la Federación Española de Fútbol.