El juez único de Competición de la Federación Española (RFEF) ha sancionado a Cristiano Ronaldo con cinco partidos de suspensión a raíz de su expulsión en la Supercopa y el posterior empujón a al árbitro Ricardo de Burgos Bengoetxea. El incidente ocurrió en el minuto 82, dos después de que el goleador portugués, que había entrado por Benzema en el 57, hubiese recibido una primera tarjeta amarilla por sacarse la camiseta tras conseguir el segundo tanto de su equipo.

El jugador fue amonestado por segunda vez después de que el colegiado interpretase que se había dejado caer para simular penalti. Vio la roja y reacciónó incrédulo dando un ligero empujón a De Burgos Bengoetxea, quien reflejó en el acta que le empujó «levemente en señal de disconformidad». El juez ha rechazado las alegaciones del club blanco tanto por la segunda amarilla como por la posterior reacción de Ronaldo, con las que pretendía que el juez considerase lo sucedido como una actitud de menosprecio o desconsideración con el árbitro y le aplicara el artículo 117 del Código Disciplinario que contempla una sanción de dos a tres partidos o hasta un mes para ese supuesto.

VIOLENCIA LEVE /El juez único de Competición, sin embargo, ha considerado que el artículo aplicable es el 96, que establece los castigos por producirse con violencia leve hacia los árbitros, es decir «agarrar, empujar o zarandear o producirse, en general, mediante otras actitudes hacia los árbitros que, por solo ser levemente violentas, no acrediten ánimo agresivo». La sanción va por ese concepto de cuatro a 12 partidos, por lo que a Ronaldo se le ha aplicado la sanción mínima.

EL ACTA / Era lo previsible después de los últimos precedentes. En el más reciente, en el partido Las Palmas-Alavés de la Liga pasada, el croata del equipo canario Livaja fue expulsado por una dura entrada a Marcos Llorente y también empujó ligeramente al colegiado Munuera Montero, lo que este reflejó en el acta como «empujón en el hombro izquierdo» sin puntualizar que fue de manera leve, como sí hizo De Burgos Bengoetxea. A Livaja se le aplicó la misma normativa y fue sancionado con cuatro partidos, además de otro más por la expulsión.

Ronaldo, como ocurrió con Livaja, tendrá que cumplir los cuatro partidos de suspensión en la Liga, por lo que se perderá los choques ligueros ante el Deportivo, el Valencia, el Levante y la Real. Volverá en el encuentro contra el Betis en el Bernabéu. El correspondiente a su expulsión lo cumplirá en el encuentro de vuelta de la Supercopa, el próximo miércoles. Además, se le imponen dos multas: 800 € por la doble amonestación y 3.005 por el empujón que ha motivado los cuatro partidos de suspensión. El Madrid también deberá pagar: 350 por la expulsión y 1.400 por la acción contra el árbitro. El club blanco recurrirá ambas sanciones.