El Consejo Superior de Deportes (CSD) ha conseguido un principio de acuerdo con las comunidades autónomas, las federaciones deportivas, la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), el Comité Olímpico y el Paralímpico Español (COE y CPE, respectivamente) y los organizadores de competiciones, para garantizar el retorno de las competiciones no profesionales de ámbito estatal, gracias a un protocolo sanitario.
Después de dos semanas de negociaciones y de que el CSD hubiese descartado el regreso a la competición sin dicho protocolo, el organismo presidido por Irene Lozano ha confirmado un acuerdo con todas las partes con compromisos sobre los aforos y sobre el «procedimiento a seguir para incorporar el criterio sanitario respecto a las pruebas de detección del covid-19». El CSD explica que «se ha conseguido consensuar el texto completo», destacando la satisfacción de la plataforma creada para el regreso de las competiciones nacionales por el «esfuerzo realizado» y por el «resultado conseguido», el cual ofrece «seguridad al sector del deporte en España».
La plataforma destaca que se trata de un «acuerdo histórico por su alcance y dimensión; y por todos los actores e instituciones que han sido involucrados». Además, considera que su relevancia es «aún mayor en base a la coyuntura inédita y especialmente negativa que propicia la pandemia».
La presidenta del CSD también reflejó en una entrevista su satisfacción porque «había tanta gente a la que poner de acuerdo, que creo que es lo mejor que se le puede brindar al deporte no profesional». «Creo que hemos hecho un trabajo extraordinario», indicó.
PCR
Además, Lozano confirmó que se ha recomendado a las federación la realización de una PCR antes del comienzo de las competiciones: «Hemos preguntado en qué condiciones sanitarias se debe hacer y también nos hemos ofrecido a poner parte del dinero y también algunas comunidades». «Veo un espíritu de llegar a un acuerdo», añadió la presidenta del CSD, pese a que este importante aspecto aún está en el aire.
Además, Lozano manifestó que «en todos los deportes no profesionales se ha establecido que las comunidades autónomas podrán decidir si permiten hasta 500 personas en un espacio cerrado y 1.000 al aire libre».
¿CON CUÁNTO PÚBLICO?
Este protocolo incluye al fútbol sala y al fútbol femenino, así como al fútbol de Segunda B hacia abajo, que sí podría tener algo de público a diferencia de Segunda A y Primera. Los gobiernos autonómicos son los que tienen la potestad para obligar a cumplir un determinado aforo y que la Generalitat Valenciana, a día de hoy, fija el límite en el 75% de la capacidad, lo cual choca con la disposición del CSD.
